Hizbulá toma el control total de Beirut oeste y cesan los combates

• Las milicias atacan una televisión y un periódico gubernamental
• Las explosiones y los tiroteos se han oído durante toda la noche
• Al menos han muerto 11 personas y otras 30 han resultada heridas
• Hizbulá ha "declarado la guerra" al gobierno libanés
• Arabia Saudí convoca una reunión de ministros de Exteriores árabes

Hizbulá controla la parte oeste de Beirut

Los seguidores del grupo chií Hizbulá y sus aliados de la oposición libanesa han tomado el control de "todas las calles" de Beirut Oeste. Después de tres días de enfrentamientos los combates en esta zona han cesado, según han confirmado a Efe fuentes policiales.

Las televisiones libanesas muestran en estos momentos las imágenes de las calles de este sector de la capital libanesa vacías y en aparente tranquilidad.

Tras tres días de enfrentamientos en las calles, en los que han muerto al menos 11 personas y otras 30 han resultado heridas, los militantes de Hizbulá y sus aliados del partido chií Amal se han hecho con Beirut Oeste, el corazón político, financiero y comercial de la capital.

El ejército, al margen

El Ejército libanés permanece hasta el momento al margen de los combates, limitado a custodiar edificios oficiales y los hogares y oficinas de algunos de los principales líderes de la mayoría parlamentaria libanesa.

Uno de sus dirigentes más destacados, el druso Walid Yumblat, ha dicho que no piensa abandonar su casa del barrio de Clemenceau y ha apelado al presidente del Parlamento, el opositor Nabih Berri, a encontrar una solución dialogada a la crisis.,

En una entrevista con el canal de televisión qatarí "Al Yazira", Yumblat ha explicado que ha puesto las oficinas de su Partido Progresista Socialista en manos del Ejército "para evitar una escalada de la violencia".

Mientras, el ministro de Juventud y Deporte, Ahmed Fatfat, uno de los más estrechos aliados de Yumblat, ha asegurado que las Fuerzas Armadas libanesas defenderán la sede del Gobierno si los militantes de la oposición pretenden hacerse con su control.

Por su parte, el dirigente opositor y aliado de Hizbulá Michel Aun ha dicho en una rueda de prensa que "nadie en el país debe sentirse perseguido" y ha instado al grupo chií a reabrir las carreteras y calles del Líbano que permanecen cerradas desde hace dos días.

Control de la zona oeste

Los milicianos de Hizbula han ido tomando el control de los bastiones suníes en los últimos tres días. Durante la última jornada han asaltado una televisión y un periódico progubernamentales.

La residencia del líder de mayoría antisiria, Saad Hariri, ha sido atacada con un cohete que ha impactado en un muro sin causar víctimas. Saad es hijo del ex primer ministro Rafic Hariri, asesinado en febrero de 2005.

El sonido de las granadas y las balas se han oído durante toda la noche en la capital. Grupos armados han atacado esta madrugada la televisión progubernamental Future New, según ha explicado a la emisora Voz del Líbano su director, Imad Assi. El propietario de la televisión asaltada es el Saad al-Hariri, el líder de la coalición de gobierno.

Tras el ataque la cadena ha suspendido sus emisiones.  Según ha explicado su director han tomado esta decisión "después de recibir amenazas". El edificio está ahora bajo la custodia del Ejército libanés.

Los simpatizantes de Hizbulá también han asaltado las instalaciones del periódico del mismo nombre que la televisión.

Los enfrentemientos comenzaron el miércoles a raíz de la huelga que había convocado la oposición. Ante la gravedad de los incidentes, la manifestación que estaba prevista tubo que ser suspendida. Pero los combates se han vuelto especialmente violentos a partir del jueves, cuando el jefe de Hizbulá hizo una "declaración de guerra" por las decisiones del gobierno.

Las dos decisiones polémicas

Nasrala aludía a la decisión gubernamental de eliminar la red de telecomunicaciones de Hizbulá y la de despedir al jefe de la seguridad del aeropuerto, Wafic Chucair, afín al grupo chií.

Tanto el aeropuerto como el puerto han permanecido bloqueados bajo el control de Hizbulá. Por este motivo, están atrapadas en el Líbano tres tenistas españolas.

Tanto el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas como la Casa Blanca han instado a Hizbulá a parar sus "perjudiciales actos".

Por su parte, Arabia Saudí ha hecho un llamamiento para que se reúnan de urgencia los ministros árabes de Asuntos Exteriores para poner fin a los combates.