Los combates en el Líbano se extienden a la frontera con Siria y dejan ya 81 muertos
- Los enfrentamientos han dejado ya al menos 81 muertos y 250 heridos
- Se están produciendo bombardeos cerca del paso fronterizo de Masna
La lucha vuelve a la ciudad de Trípoli en las últimas horas
Los enfrentamientos se trasladan a la frontera con Siria. Los combates entre los partidarios de la mayoría y de la oposición libanesa, liderada por Hizbulá, se han extendido al valle oriental de la Bekaa. Lucha se ha intensificado en esta zona después de que se calmara en las regiones montañosas del sureste de Beirut donde se han librado esta noche los peores enfretamientos.
Los combates se han reanudado también en Trípoli, en el norte del país. Los enfrentamientos han obligado al éjército a retirarse.
Fuentes policiales han explicado a Efe que se están produciendo bombardeos en las proximidades del paso fronterizo de Masna, el principal nexo entre el Líbano y Siria, cerrado hace dos días por seguidores del dirigente de la mayoría, Saad Hariri.
Según la emisora de radio la Voz del Líbano, se escuchan disparos en las cercanías de Masna en la zona de Anjar, en el valle oriental de la Bekaa.
Los choques entre partidarios de la mayoría parlamentaria y de la oposición, han causado al menos 81 muertos y 250 heridos desde que estalló la crisis hace cinco días, según fuentes policiales.
Al menos 36 personas han perdido la vida en los combates de las montañas del Chuf, en el sureste del Líbano, donde operan simpatizantes del líder druso Walid Yumblat, aliado del primer ministro, Fuad Siniora, según medios locales.
La situación se ha calmado en esta zona, después de que entrara en vigor un alto al fuego a las 00.30 horas.
La violencia ha cesado en las zonas situadas al sureste de Beirut tras el despliegue anoche del Ejército, y en la capital, después de que el sábado pasado los milicianos de Hizbulá se retiraran de las calles.
Situación en Beirut
La calma se había impuesto en Beirut y en Trípoli, la principal ciudad del norte del Líbano, tras los duros combates de los últimos días, a pesar de que el aeropuerto de la capital continúa cerrado. En Trípoli, sin embargo, se han reanudado los enfrentamientos entre los partidarios del gobierno y Hizbulá.
Los enfrentamientos se iniciaron el pasado miércoles, después de que el secretario general de Hizbulá, Hasan Nasralá, asegurara que la decisión del Gobierno de acabar con la red de telecomunicaciones de su grupo era "una declaración de guerra".
Sin embargo, tras hacerse con el control de amplias zonas de Beirut y de otras ciudades, el grupo chiíta decidió ceder sus posiciones al Ejército, que previamente había frenado dos decisiones del Gobierno en contra de la organización radical islámica.
Frente al deterioro de la situación en el Líbano, los ministros árabes de Asuntos Exteriores, reunidos en el Cairo, han lanzado una llamada urgente a poner fin de modo inmediato a la violencia en el Líbano.
También han anunciado el envío de una delegación árabe, presidida por Qatar, para tratar de encontrar una salida a la crisis que amenaza con desembocar en una nueva guerra civil en el país de los cedros.