El violador de una niña de 10 años a la que dejó embarazada pide perdón en el juicio

• El Fiscal reduce de 25 a 17 años su petición de cárcel para el agresor
• El hombre violó a la niña que cuidaba su compañera sentimental en Ourense
• La acusación pide la retirada de la patria potestad

El acusado de dos agresiones sexuales a una niña de 10 años que resultó embarazada y tuvo un bebé, Andrés Julián L.H. de 34 años, ha admitido en el juicio celebrado este lunes las dos agresiones, una consumada y otra en grado de tentativa. Ha pedido perdón antes de volver a la prisión.

El juicio ha comenzado esta mañana casi dos horas después de la hora prevista. Momentos antes, la abogada del acusado ha explicado que además de la agresión sexual consumada del verano de 2005, ha admitido ser autor de otra en grado de tentativa.

De 25 a 17 años de cárcel

La Fiscal pedía al principio 15 años de prisión por la agresión sexual consumada y otros 10 por el intento anterior de agresión. Tras admitir el acusado ambos hechos, el Ministerio Público ha modificado sus conclusiones y ha pedido 13 años y medio por la agresión consumada y otros cuatro por la tentativa, además de 250 euros de pensión alimenticia para el bebé y 200.000 euros de indemnización por daños físicos y morales a la víctima.

La madre de la víctima, Laura Montenegro ha explicado en el juicio que su hija estaba a cargo de la compañera del acusado mientras ella "trabajaba fuera de Ourense de martes a domingo".

Ha señalado que buscó una familia-canguro de su misma nacionalidad colombiana para dejar a su hija durante la semana, de forma que el acusado y su compañera atendiesen sus necesidades igual que hacían con sus propias hijas.

"Deposité toda mi confianza en ellos, aunque la persona que estaba directamente a cargo de mi niña era Lucelly -compañera de Andrés Julián-".

Rehuye a los otros niños

La madre de la víctima ha explicado que, desde que fue violada, su hija rehuye relacionarse con otros niños del colegio y que ya no se pone bañador "como si tuviese vergüenza", además de ser más callada.

La acusación particular ha pedido que se le quite al acusado la patria potestad sobre el bebé nacido a raíz de la agresión y que no figure en el registro civil como progenitor del bebé.

La petición incial de 25 años de cárcel se ha reducido a 17 a cambio de que el reo reconociese su autoría.

El acusado ha intervenido en los últimos minutos del juicio, con autorización del juez, y ha pedido perdón. Tras sus palabras ha sido esposado de nuevo por agentes de la Guardia Civil y trasladado a prisión, donde está ingresado desde 2005.