Rajoy afirma que la unanimidad "es imposible" y apela a la unidad en torno al "centro reformista"

• Rayoy y Aguirre escenifican sus diferencias en una cena organizada por el PP de Madrid
• El presidente del PP espera que el Congreso de Valencia sirva para relanzar al partido
• Dice que es esencial "la unidad en torno a unos principios" aunque se discrepe en estrategia
• Mariano Rajoy insiste en que llegarán a gobernar como Aznar lo hizo en el 96, desde el centro
• Señala que es bueno "dialogar lealmente", mientras Aguirre rechaza hablar con "radicales"
• La presidenta madrileña pide que no se hagan "cambios radicales que nadie entendería"

Rajoy y Aguirre escenifican sus discrepancias

El presidente del PP, Mariano Rajoy, ha señalado que "la unanimidad es imposible" en cualquier organización, por lo que espera que el próximo Congreso del PP sirva para relanzar el partido y para que "los compromisarios decidan lo que tengan que decidir".

Rajoy ha asistido esta noche a una cena organizada por el PP de Madrid para celebrar la victoria electoral en las elecciones autonómicas y municipales conseguida en mayo de 2007. En ella ha estado también la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, entre otros dirigentes del partido. Estaba prevista la presencia del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, pero se ha disculpado porque tenía que asistir a otra cena del Comité Olímpico Español.

Rajoy y Aguirre han aprovechado este encuentro para escenificar sus diferencias en los discursos que han pronunciado al comienzo de la cena celebrada en San Sebastián de los Reyes, en Madrid.

El presidente del PP, que aspira a la reelección en el XVI Congreso del PP que se celebrará en Valencia del 21 al 23 de junio, ha señalado la necesidad de que el partido permanezca un ido en torno a unas ideas y principios comunes: "Mi objetivo prioritario es que el PP salga unido en torno a unas ideas que son las que nos hacen ser un partido referente para millones de españoles".

Sin embargo, Rajoy ha admitido que el Congreso debe tratar de integrar todas las posturas, por lo que ha dicho que espera que en el Congreso "haya debate y que los compromisarios decidan lo que tengan que decidir". Quiere, ha subrayado, que este congreso sirva para relanzar al PP, como en los anteriores.

"Luego puede haber, como en toda organización, opiniones distintas sobre algunas estrategias. La unanimidad es imposible, pero lo importante es la unidad del partido en torno a unos principios y unas ideas", ha reiterado Rajoy.

El presidente del PP ha hecho un llamamiento para tener "claras las ideas fundamentales" que les unen a todos, aunque luego pueda haber opiniones diferentes sobre las estrategias.

Centro reformista

Rajoy ha tirado de una figura clave en el PP en su discurso de la cena. El presidente popular ha querido resaltar, además, el carácter "de centro reformista" que, a su juicio, está en la esencia del PP y que ayudó a José María Aznar a ganar las elecciones en 1996. En su opinión, este carácter de centro será el que devuelva al partido a La Moncloa: "Tengo la total y absoluta convicción de que volveremos a gobernar" en 2012, ha subrayado Rajoy.

Rajoy ha señalado que la mayoría de los españoles quieren que el Partido Popular sea de "centro reformista", que la sociedad y el mundo han cambiado y hay que dar respuesta y "adelantarse a la realidad".

El presidente popular ha respondido así a la enmienda presentada por el ex ministro y ex secretario general, Francisco Álvarez Cascos, para que se retire de la ponencia política que se debatirá en el Congreso de Valencia la definición del PP como partido de centro.

Defensa del diálogo

Mariano Rajoy ha hecho una defensa de la vuelta al diálogo. El diálogo "es bueno con quien quiera hacerlo lealmente", ha comentado en alusión a posibles pactos de estado con el Gobierno socialista. "Dialogar no implica tener que llegar a acuerdos ni renunciar a las ideas y principios en los que uno cree".

El presidente popular ha insistido en que no tiene nada que cambiar, "ni una coma", sobre lo que defendió en la pasada legislatura sobre el Plan Ibarretxe, la negociación con ETA o el Estatuto de Cataluña. Si alguien vuelve a plantear debates similares "el PP va a seguir donde estaba".

Rajoy ha terminado su intervención asegurando que va a "seguir dando la batalla" por algo en lo que cree profundamente: España y los españoles.

Aguirre pide evitar "cambios radicales"

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que ha intervenido antes que Rajoy, ha utilizado su discurso para hacer una defensa a ultranza de los principios del PP, que no pueden cambiarse.

Para Aguirre los resultados conseguidos en las últimas elecciones generales el 9 de marzo, con 10,3 millones de votantes, demuestran que "las ideas que el PP ha defendido en los últimos cuatro años, cada vez tienen más apoyo entre los españoles".

En este sentido, la presidenta madrileña ha recalcado que el partido debe ser fiel a los compromisos adquiridos con los españoles que les votaron en los últimos comicios. "Tenemos que seguir defendiendo nuestros valores y principios sin hacer cambios radicales que nadie entendería".

La presidenta de Madrid también ha reiterado que el PP no debe "caer en las trampas ideológicas de nuestros adversarios, no aceptar que sean ellos los que distribuyan los carnés de buenos y malos, duros y blandos, simpáticos y antipáticos, ya que su único recurso es la descalificación", en alusión al PSOE al que ha criticado por dialogar con "radicales". Aguirre asegura que "etiquetar sin argumentos es lo más autoritario en política".

Esperanza Aguirre ha recordado la victoria lograda hace un año en las elecciones autonómica y municipales y ha resaltado, asimismo, el "gran resultado" obtenido en las elecciones generales del 9 de marzo, pese a que "no nos ha permitido gobernar" a pesar de haber obtenido medio millón más de votos. Si no se consiguió llegar a La Moncloa "no ha sido por que las ideas y los principios del PP sean peores que los de los adversarios"

Aguirre, por último, ha hecho mención a su ya conocido "pico y pala" para mejorar los mejores resultados electorales. Hay que seguir trabajando, ha concluido, "para convencer a los españoles de que la España de Zapatero es inviable, que es una España menguante" y que la ideología del PSOE es el oportunismo para conseguir el poder a cualquier precio".