El Congreso abre una investigación al presidente Uribe por presunto cohecho
- Estudiará si se pagaron sobornos a parlamentarios para apoyar la reforma constitucional
- Los cambios en la Carta Magna permitieron la reelección de Uribe como presidente
- Tres parlamentarios han reconocido que recibieron sobornos para cambiar su voto
El Congreso colombiano ha abierto una investigación al presidente, Álvaro Uribe, para saber si ha estado envuelto en un delito de cohecho para obtener suficientes apoyos para la reforma constitucional que permitió su relección como presidente.
Las pesquisas se iniciarán tras la denuncia de una congresista, que afirmó haber recibido favores para votar en 2004 en favor de la reforma constitucional que permitió la reelección de Uribe.
La querella contra el mandatario fue formulada por una decena de congresistas del opositor Polo Democrático Alternativo (PDA), después de que la Corte Suprema de Justicia remitiese a la comisión una copia de las investigaciones que hace a congresistas involucrados en el caso.
"Hemos abierto el proceso preliminar", ha explicado el legislador Edgar Torres. "El país debe ser capaz de saber que ocurrió".
Según explica el corresponsal de RNE en la zona, Fran Sevilla, han sido ya tres parlamentarios los que han reconocido que recibieron sobornos para apoyar la reforma constitucional.
Las autoridades colombianas detuvieron la semana pasada a Iván Díaz Mateus, tercer ex parlamentario en ser vinculado dentro de una investigación por presuntos sobornos para aprobar la reforma constitucional.
El 28 de abril la ex congresista Yidis Medina se entregó a las autoridades tras confesar que supuestamente fue sobornada por altos funcionarios del Gobierno, para que cambiara su voto en contra de esa reforma.
Además, entregó documentos según los cuales el Gobierno consignó dinero al congresista Teodolindo Avendaño, también detenido, para que se ausentara el día de las votaciones dada su oposición a la enmienda constitucional.
Ya se conoce el objetivo
El Gobierno colombiano ha hecho público que las FARC planeaban atentar contra personalidades colombianas en Madrid. La información se encontró en el ordenador de Raul Reyes, el líder de la guerrilla que murió hace unos meses en una operación militar.
Según las últimas informaciones, el objetivo era el vicepresidente de Colombia, Francisco Santos, y otras personalidades.