Carla Bruni relata que lo suyo con Sarkozy fue un "flechazo" en una cena arreglada

• La primera dama francesa desvela en un libro cómo se enamoró de Nicolas Sarkozy
• Le sedujo la inteligencia de un hombre con "cinco o seis cerebros increíblemente irrigados"
• La cantante asegura que el presidente frances "va muy, muy deprisa"

Sarkozy y Bruni se besan en público tras salir del Palacio del Elysee.

La pregunta de cómo era posible que Carla Bruni se hubiera enamorado de Nicolás Sarkozy ya tiene respuesta. La primera dama de Francia asegura que le sedujo su inteligencia. El presidente galo tiene, según su querida esposa, "cinco o seis cerebros increíblemente irrigados".

Bruni evoca la pasión que siente por su marido, así como su "inimaginable" capacidad de trabajo, en "La Véritable Histoire de Carla et Nicolas", es decir, "La verdadera historia de Carla y Nicolas". El libro sale a la venta este jueves en Francia. Los primeros fragmentos se pueden leer ya en "Le Parisien" y "Le Point".

En el libro, la modelo y cantante confiesa que se conocieron en una cena arreglada organizada por Jaques Seguera, el asesor electoral del presidente socialista François Mitterrand. Eran, dice, los únicos dos solteros de la cita.

La famosa cantante, que va a sacar este verano su próximo disco, augura que cuando Sarkozy deje la política "se van a aburrir". El libro, escrito por Valérie Benaïm e Yves Azéroual y publicado por las Ediciones du Moment, la ex maniquí internacional, que se casó el pasado 2 de febrero ha afirmado que no piensa abandonar su carrera musical, aunque sí los escenarios, durante el periódico presidencial.

Las canciones del nuevo disco, que debería haber salido a finales de 2007, no tienen "nada de subersivo", sólo cuantan "pequeñas historias que son las mismas que las suyas", previene la artista.

Las letras fueron escritas antes del fulminante encuentro, el martes 13 de noviembre de 2007. Además de ellos dos, a la cena acudieron dos parejas más.

"Enseguida comprendí que era una 'bind date' (una cena arreglada)", explica Carla Bruni, al recordar que los dos únicos solteros de la noche eran ella y Sarkozy, quien acababa de divorciarse.

Sarkozy solo tuvo ojos para ella durante la cena, tras la que la acompañó a casa. A la noche siguiente estaban cenando a la luz de las velas.

Flechazo "inmediato"

El flechazo "fue inmediato. No me esperaba alguien tan divertido, tan vivo. Su físico, su encanto, su inteligencia me sedujeron. Tiene cinco o seis cerebros increíblemente irrigados", explica Carla en un fragmento reproducido por el semanario "Le Point" y el diario "Le Parisien".

"No había conocido antes a cretinos, no es mi estilo, pero él, va muy, muy deprisa", añade la primera dama, que tiene en su haber un intenso pasado amoroso.

Aunque se define como una simple "cantante de folk", Carla Bruni dice ser consciente de haber "heredado con su matrimonio" una "función", sobre cuyo contenido "empieza ahora a ver un poco más claro".

"Tengo dos prioridades: actuar globalmente sobre la pobreza en el mundo y luchar contra la ignorancia".

La lucha contra el sida también interesa a la primera dama francesa, concentrada, asimismo, en ayudar al presidente "a cuidar su higiene de vida", pues "es como todos nosotros, un poco como Sisifo, le gusta llevar la piedra".

"Pero es de buena composición, tres rayos de sol y encuentra la vida magnífica", añade la tercera esposa de Nicolás Sarkozy.