El PP respalda a Rajoy, que se presenta "sin recomendaciones de nadie" al XV Congreso
En el XV Congreso se escenific
Rajoy había sido elegido por Aznar como su sucesor en septiembre de 2003, pero ahora, después de la derrota del 14-M tras los atentados de Madrid, el nuevo líder del Partido Popular se somete a la votación de los compromisarios "sin recomendaciones de nadie".
El XV Congreso del PP se celebró entre el 1 y el 3 de octubre de 2004 bajo el lema 'España, la ilusión que nos une'. En él se escenificó el traspaso de poderes entre José María Aznar y Mariano Rajoy. El nuevo presidente del Partido Popular consiguió el respaldo del 98,37% de los compromisarios.
Rajoy, quien confesó por primera vez en público que la noche electoral estuvo a punto de tirar la toalla, se presentó preparado para llevar al PP al Gobierno y relevar al PSOE "si las cosas se tuercen". "España nos está esperando y vamos a cumplir", como tituló el resumen de su discurso un periódico aquellos días.
"El 14 de marzo pasó lo que pasó. Todos sabemos lo que pasó y por qué pasó. Pero eso ya es pasado", afirmó Rajoy, quien pidió un apoyo total, "sin tibiezas" para regresar a La Moncloa porque "estamos preparados, ya, en cualquier momento".
La autocrítica de Gallardón
El XV Congreso comenzó con la intervención del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, que realizó una autocrítica sobre lo ocurrido en las elecciones de marzo. El "algo, reconozcámoslo, hemos debido hacer mal" provocó un gran malestar en los corrillos del Congreso.
El regidor madrileño fue más allá al hablar de cómo se gestionó la comunicación después del 11-M. Puede, dijo, que el PP no identificara "suficientemente los sentimientos de un importante grupo de ciudadanos. Quién sabe si acertamos a utilizar los estilos apropiados".
También hizo autocrítica la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, aunque no de una forma tan abierta como el alcalde. Ella dijo que el congreso debía servir para que analizaran sus propios errores.
Pero frente a estos discursos, Ángel Acebes y el mismo Aznar hicieron una defensa a capa y espada de la gestión de sus últimos días en La Moncloa.
Acebes y la Guerra Civil
Acebes, ministro del Interior cuando estallaron las bombas en los trenes, tuvo palabras duras: "Tanto en la campaña electoral del 14-M como después de formar Gobierno, el espíritu de 1978 ha sido sustituido por la incitación a recordar el 36, fomentando incluso con iniciativas institucionales el recuerdo del escenario que desembocó hace setenta años en la guerra civil".
Aznar también intervino en la clausura del XV Congreso y lo hizo con palabras muy duras alejadas del tono más conciliador de Rajoy. Era su despedida oficial de la primera línea de la política. A partir de ahora sería presidente de honor del partido, una figura creada en aquel cónclave para él.
Aznar emplazó a su sucesor a hacer una oposición dura contra el Ejecutivo de Zapatero y a olvidarse de las autocríticas. "El día que sintamos vergüenza de haber gobernado estaremos incapacitados para volver a gobernar", sentenció.
Aznar y el 11-M
Sobre el 11-M no reconoció ningún posible error ya que "fueron otros los que mintieron, engañaron, manipularon y forzaron la voluntad popular". "Los que tenemos la razón somos nosotros", sentenció. El PP, "que nunca ha usado cal viva para encubrir ningún asesinato", dijo en relación a los GAL.
Aznar defendió su posición ante la guerra de Irak, aunque sin mencionarla expresamente. "Hicimos lo correcto cuando decidimos implicarnos hasta el cuello en la lucha contra el terrorismo y colaborar con nuestros amigos y aliados".
Rajoy consiguió la renovación de la mitad de la dirección y dio más peso a los barones regionales del partido. Javier Arenas deja la secretaría general del partido que pasa a ocupar Ángel Acebes.
El nuevo líder crea seis nuevas secretarías ejecutivas: Sebastián González (Organización), Gabriel Elorriaga (Comunicación), Miguel Arias Cañete (Política Económica), Ignacio Astarloa (Seguridad y Justicia), Ana Pastor (Política Social) y Soraya Sáenz de Santamaría (Política Autonómica y Local).
Cambio de los avales necesarios
En el XV Congreso se introdujo un cambio importante en los estatutos de gran actualidad ahora que se va a celebrar el XVI. Hasta entonces, para presentar una candidatura se necesitaban solo 50 avales de los compromisarios.
Desde 2004, es necesario el apoyo de una quinta parte de los compromisarios, lo que supone unos 600 avales. Un requisito que complica la presentación de listas alternativas como han criticado en las últimas semanas los críticos de Rajoy como el ex ministro Juan Costa, que finalmente no presentará candidatura alernativa.