Al menos 1.150 prisioneros escapan de una cárcel afgana donde ha estallado una bomba
- Entre los fugados se calcula que hay unos 400 talibanes
- Los rebeldes talibanes han volado la puerta de la prisión
Más de 1.150 prisioneros se han fugado de la prisión de Kandahar, en Afganistán, después de que una bomba colocada por rebeldes talibanes derribase la puerta del presidio.
Los insurgentes talibanes han utilizado un camión bomba para volar la puerta de la prisión, y varios suicidas hicieron explotar la carga que llevaban en el interior del penal, lo que causó un número indeterminado de víctimas mortales entre los policías que custodiaban la cárcel.
Además, las fuentes que están sobre el terreno aseguran que los rebeldes también han lanzado varios cohetes contra los muros de la prisión, que eran bastante frágiles, pues estaban construidos con ladrillos de adobe.
Según Wali Karzai, hermano del presidente del país y presidente del Consejo Provincial de Kandahar, "todos los prisioneros han escapado. No ha quedado ni uno".
Karzai añadió que entre los presos liberados había un grupo de 350 talibanes que se encontraban en huelga de hambre desde hace un mes.
El asalto con lanza granadas y armas ligeras ha durado unos treinta minutos.