Löw: "Ballack no está descartado aún"
- Una lesión en el gemelo le tiene apartado de los entrenamientos desde el viernes
- Es el capitán de la selección y pieza clave en el dibujo ofensivo de Joachim Löw
- Ya se perdió la final del Mundial de 2002 por acumulación de tarjetas
El capitán de la selección alemana, Michael Ballack, es seria duda para la final de la Eurocopa que disputará su equipo frente a España, debido a una lesión muscular en el gemelo, según ha hecho saber en un comunicado la Federación alemana.
Según informa la página web de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), el '13' alemán, aquejado de dolores musculares desde la mañana del viernes, ya no participó en el último entrenamiento del viernes por la tarde en la localidad suiza de Tenero.
El selecionador germano, Joachim Löw, ha aclarado, no obstante, que Ballack "no está descartado aún". El capitán alemán, cuatro veces ganador de la Bundesliga, tiene un problema muscular en el gemelo derecho desde el viernes por la mañana, no se entrenó este sábado en el Ernst Happel y tampoco lo hizo el viernes por la tarde en el entrenamiento en Tenero (Suiza), donde se concentró la selección germana durante la Eurocopa, según informa la Federación Alemana (DFB).
"No sabemos bien por qué se ha hecho esta lesión. Igual hace unos días se dio un pequeño golpe y se le manifestó ahora. Pero no sé el porqué", indicó. "De todas maneras, he hablado con él esta tarde y le vi optimista. No está hundido, porque según los médicos, aún tiene posibilidades. Si al final no puede jugar, será una decepción para todos, pero haremos todo lo posible para que juegue", declaró Löw.
"El equipo médico está trabajando durante las 24 horas del día para intentar recuperarlo", ha indicado el técnico, que ha explicado, no obstante, que "en esa posición pueden jugar Tim Borowski o Bastian Schweinsteiger" y que "Alemania no va a hacer grandes cambios tácticos" debido a la hipotética baja del centrocampista.
Su participación se decidirá en el último momento
La decisión sobre su participación en la final de Viena, a sólo 24 horas de disputarse el encuentro entre Alemania y España, está abierta y no se conocerá hasta poco antes de la final. Por el momento, Ballack permanece bajo atención de los servicios médicos de la selección alemana en el hotel de concentración del equipo.
El carismático jugador, de 31 años, es el referente de Alemania, líder de su equipo dentro y fuera del campo, y su eventual ausencia en la final del domingo supone un duro golpe, no sólo por ser una de las estrellas del equipo, sino porque incluso el técnico cambió el sistema para favorecer su juego ofensivo y le blindó con dos centrocampistas de contención, un esquema que le sirvió para vencer a Portugal y Turquía, en los cuartos y las semifinales.
Ballack ha marcado dos goles en el torneo y fue el jugador más destacado del triunfo de Alemania sobre Portugal en el partido de cuartos de final, que ganó Alemania por 3-2, si bien su participación en las semifinales frente a Turquía (a la que también vencieron los germanos por 3-2) fue más discreta.
La mala suerte persigue a Michael Ballack, que nunca ha jugado la final de un torneo con Alemania, tricampeona del mundo que aspira a su cuarto título en la Eurocopa. Ya se perdió la final del Mundial de Corea y Japón en 2002 por una sanción, y fue eliminado por Italia en las semifinales del Mundial de Alemania en 2006.