Garzón deja libres bajo fianza a las empresarias acusadas de pagar el impuesto revolucionario
- Las hermanas Bruño Azpiroz estaban acusadas de colaborar con ETA y pagarle 6.000 euros
- Las deja libres bajo fianza de 20.000 euros porque la investigación judicial está muy avanzada
- Las empresarias recibieron una carta de agradecimiento de la banda por la aportación
El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha dejado hoy en libertad bajo fianza de 20.000 euros a las hermanas María Isabel y Blanca Rosa Bruño Azpiroz, que ingresaron en prisión el pasado día 12 acusadas de colaborar con ETA y de haber pagado 6.000 euros de forma voluntaria a la banda.
Fuentes jurídicas han informado de que el magistrado -que ha impuesto a las dos mujeres la prohibición de salir del país y la obligación de comparecer semanalmente en el Juzgado- ha tomado esta decisión al considerar que la investigación judicial está ya muy avanzada y que las medidas cautelares deben adecuarse al estado actual del procedimiento.
En el auto de prisión de las hermanas Bruño Azpiroz, detenidas el pasado día 11 en Orio (Guipúzcoa), el juez consideraba que ambas están muy próximas ideológicamente a ETA y que "tienen la vía" abierta para seguir colaborando con la banda.
En la causa consta una carta de agradecimiento de ETA remitida a las empresarias por efectuar un pago de 6.000 euros, realizado en una fecha entre 2003 y 2008, y que fue hallada en la documentación intervenida a raíz del arresto el pasado 20 de mayo, en Burdeos (Francia), de Francisco Javier López Peña, Thierry, considerado uno de los máximos dirigentes de la banda.
En esa carta, la organización les agradece la aportación realizada "por la libertad de Euskal Herria" y les anima, apelando a su "patriotismo", a que "en el futuro sigan realizando aportaciones económicas al proceso de liberación, con el convencimiento de que tienen la vía para ponerse en contacto con la organización".
Para Garzón, que fue quien ordenó los arrestos de las hermanas, este párrafo "denota, por una parte, la proximidad ideológica" y, por otra, que tienen "la vía para seguir colaborando con ETA", la cual, ha señalado el magistrado, no han querido desvelar. Además añadía que estas expresiones no aparecen en las cartas habituales que ETA envía a empresarios para exigir el pago del "impuesto revolucionario".
Durante su declaración, las dos mujeres admitieron haber recibido en 2003 y 2005 dos cartas de extorsión de la banda terrorista, pero aseguraron que no habían pagado lo que se les pedía y que rompieron las misivas.
Las hermanas Bruño Azpiroz son socias y tienen cargos ejecutivos en la empresa familiar Andrés Bruño e Hijos S.L., dedicada a la comercialización de angulas y marisco. Blanca Rosa, gerente de la compañía, fue firmante de la plataforma electoral Aukera Guztiak, declarada ilegal el 29 de marzo de 2005. Por su parte, María Isabel, consejera de la citada empresa, formó parte de las listas de Euskal Herritarrok en las elecciones a las Juntas Generales por Orio en 1999 y firmó la constitución de la agrupación electoral Aukera Guztiak.