Inquietud por las posibles represalias de las FARC contra los rehenes
- Los familiares de los secuestrados temen la venganza de la guerrilla
- Ingrid Betancourt muestra su respaldo a los rehenes a través de la radio
- "No voy a dejar un segundo de abogar por su libertad", dice la franco-colombiana
Tras la liberación de la ex candidata a la presidencia de Colombia, Ingrid Betancourt, y de otros 14 secuestrados por las FARC, los familiares de los rehenes que aún siguen en manos de la guerrilla están inquietos por las repercusiones de la operación militar que posibilitó el rescate.
Muchos allegados temen que se produzcan represalias contra los secuestrados, como venganza por la liberación de algunos de los rehenes más valiosos para las FARC, sobre todo Ingrid Betancourt.
"Les merman la comida, no tienen acceso a medicamentos...", explica la esposa del capitán Luis Mendieta, María Teresa. "Nos estamos pudriendo en esta selva", señalaba recientemente en un vídeo el congresista Óscar Tulio Lizcano, que lleva nueve secuestrado.
"No voy a dejar un segundo de abogar por su libertad"
Ingrid Betancourt, por su parte, ha prometido a los rehenes que siguen cautivos que impulsará el apoyo internacional para su liberación. "A los que están en la selva, ustedes saben que cuando yo me comprometo a algo lo hago de verdad: no voy a dejar un segundo de abogar por la libertad de ustedes y por lograr canales de comunicación con las FARC y con los países que podamos movilizar para que ustedes puedan volver rápidamente", ha dicho Betancourt.
En un mensaje lanzado desde París a través del programa de radio Las voces del secuestro, que los fines de semana transmite mensajes de los familiares a los rehenes, Betancourt ha insistido en su respaldo: "Ya lo estoy haciendo, lo seguiremos haciendo".
"Los amo, los quiero, a cada uno de ustedes lo llevo escrito en mi corazón. Me acuerdo de las marchas cuando nos encontrábamos y a los que no nos hemos encontrado, a los que no hemos estado juntos, es decir a todos los que no he podido ver pero que están allá, que ahí estoy con ustedes, ahora y cuando nos podamos abrazar y eso va a ser muy pronto", ha añadido, recordando que cuando estaba en la selva ansiaba el programa de radio para oír los mensajes de su madre, Yolanda Pulecio, y de otros familiares.