Soplar para poder arrancar
La Dirección General de Tráfico estudia poner alcoholímetros en los coches de los conductores reincidentes, aquellos que ya tienen multas por circular bebidos.
Este dispositivo, conocido como Alcolok, impide arrancar si la persona ha consumido alcohol. Los aparatos se alquilan y el precio oscila entre los 50 y los 12.000 euros al año.
Los expertos dicen que así se evitarían más de cien muertes al año.