La huelga nacional paraliza Perú con marchas masivas y bloqueo de vías

La huelga nacional paraliza parte de Perú

Marchas masivas y bloqueos de carreteras en diversos puntos de Perú han sido la tónica dominante en la huelga nacional contra la política económica y social del presidente, Alan García, en la que al menos 21 policías resultaron heridos y otras 216 personas fueron detenidas.

La protesta se realiza en un contexto de rápido crecimiento económico pero en el que la población no se beneficia de los frutos de la economía. Perú brilla por el 8,3 % de crecimiento económico registrado en 2007, uno de los más altos de la región y que contrasta con los peores salarios del continente y niveles de pobreza en 40 % de la población. 

Además, el malestar en Perú se agrava por la subida de los precios de los alimentos y los combustibles, contando con que la inflación del primer semestre fue de 3,51 % y el sueldo mínimo es de 500 soles (unos 177 dólares).

Las exigencias de este paro, declarado ilegal por el Ministerio de Trabajo, son el aumento de sueldos y la derogatoria de varios decretos privatizadores, entre ellos los que promueven las inversiones en tierra de las comunidades campesinas y amazónicas o en zonas declaradas patrimonio histórico o cultural.

Violentos ataques

A pesar de que el ministro del Interior, Luis Alva Castro, ha manifestado que durante la jornada no se registraron "hechos que lamentar", en el interior del país se produjeron ataques violentos contra locales estatales en las regiones de Madre de Dios y Huancavelica.

Al menos 21 policías han resultado heridos durante el ataque de miles de manifestantes a la sede del gobierno regional de Madre de Dios, en la amazonía peruana, según ha confirmado el representante de la Defensoría del Pueblo, Humberto Cordero.

Cordero ha señalado al portal del diario El Comercio que uno de los policías ha resultado herido por un flechazo en un brazo y que todos los afectados se mantienen en situación estable en el Hospital Santa Rosa, de la ciudad de Puerto Maldonado, capital de Madre de Dios. "Quienes han estado involucrados en este acto vandálico son miembros de comunidades nativas, mineros y jóvenes vándalos que están aprovechando el pánico", ha afirmado.

Los manifestantes han protestado contra la denominada "Ley de la Selva", una propuesta que aún no ha sido aprobada por el Congreso, pero es rechazada por supuestamente facilitar la venta de tierras de las comunidades y promover la inversión privada en reforestación.

En la ciudad andina de Huancavelica otro grupo de manifestantes ha atacado la oficina regional del programa social Juntos, ha destruído los archivos y retuvo a tres personas, que luego fueron liberadas cuando un vigilante realizó varios disparos al aire.

Según la emisora Radioprogramas, los manifestantes entraron al local gritando lemas contra el Gobierno, tras lo cual destruyeron muebles, quemaron documentos y robaron tres ordenadores.

Bombas lacrimógenas y carreteras cortadas

Al ofrecer un balance del paro convocado por varias organizaciones encabezadas por la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), Alva Castro ha indicado que 216 personas fueron detenidas por pretender bloquear carreteras y cometer actos ilícitos.

Al inicio de la jornada, otro grupo de manifestantes se ha enfrentado a la Policía cuando intentaba despejar las vías de la populosa periferia norte de Lima, mientras que otros trabajadores han agredido a la prensa en una zona céntrica de la capital peruana.

Además, las fuerzas del orden han utilizado bombas lacrimógenas para despejar un tramo de la carretera Panamericana, que atraviesa toda la costa peruana, a la altura de la región de Ica, a unos 200 kilómetros al sur de Lima.

Las emisoras locales también han informado de varios bloqueos de carreteras en el interior del país, donde se ha sentido con mayor fuerza el paro, principalmente en las sureñas regiones de Puno y Arequipa.

Gran despliege policial

En Cuzco, donde se desarrolla una reunión preparatoria para la cumbre de líderes del Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC), que acogerá Lima en noviembre próximo, las actividades transcurrieron con tranquilidad.

El Gobierno ha desplegado unos 100.000 efectivos policiales, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, para garantizar el orden durante la huelga nacional.

Los manifestantes se han pronunciado contra la criminalización de la protesta social y demandaron atención a la "agenda agraria y social" para que no se reduzcan los derechos laborales y combatir la corrupción gubernamental, ha dicho el secretario general de la CGTP, Mario Huamán.

La CGTP ha calificado la paralización de "contundente y exitosa a nivel nacional", mientras que el Gobierno ha señalado que la mayoría de peruanos ha realizado sus actividades con normalidad, aunque también ha admitido que existe descontento por el alza mundial de los precios de los alimentos.