300 personas para asesorar a Obama en política exterior
- Un Departamento de Estado a pequeña escala asesora al candidato
- Obama prepara su primer viaje internacional como candidato demócrata a la Presidencia
- La mayoría del núcleo duro de asesores trabajó en la administración de Bill Clinton
El flanco débil del candidato demócrata a la presidencia de los Estados Unidos, Barack Obama, es su falta de experiencia en política exterior. Todos lo saben, y especialmente su rival, John McCain, que no dudará en aprovecharlo.
Por ello, en el cuartel general que el senador por Illinois tiene en Chicago, cada día a las ocho de la mañana sus consejeros en materia de política internacional le envían dos correos electrónicos: un breve resumen de las principales cuestiones sucedidas a lo largo del mundo en las 24 horas anteriores, y otro con una serie de preguntas acompañadas de posibles respuestas que el candidato tendrá que responder a lo largo de las 24 horas siguientes.
Como cuenta el International Herald Tribune, un 'ejército' de 300 personas compone el equipo de campaña dedicado sólo a política exterior. Se trata de un Departamento de Estado a pequeña escala dedicado a asesorar al candidato y rebajar así la preocupación de los votantes que temen su inexperiencia.
Preparando el primer viaje al exterior como candidato
"Es difícil de manejar, sin duda", dice Denis McDonough, de 38 años, coordinador de los consejeros en política exterior, al describir una infraestructura de personas que se ha dividido en 20 equipos regionales y temáticos, y que ha contratado recientemente -no sin tensiones- al principal consejero internacional del equipo de campaña de Hillary. "Pero una administración es difícil de manejar también", señala.
Este mini-Departamento de Estado está en primera línea de batalla esta semana, mientras Obama prepara su primer viaje internacional como candidato demócrata a la Presidencia.
Pero no todo en el currículo del senador por Illinois es falta de experiencia en política internacional. Obama ha trabajado desde su elección en 2004 en el Comité para Relaciones Exteriores del Senado. Su equipo de campaña dice que está bien preparado y que a menudo cambia y amplía los puntos en discusión que le ofrecen sus consejeros.
La mayoría del núcleo duro de este enorme equipo trabajó para Bill Clinton, aunque fuesen mucho menos experimentados que otros de los que trabajaron para la campaña de la espossa del ex presidente.
Antiguos miembros de la administración Clinton
Y la mayoría de ellos, como el candidato para el que trabajan, se distinguen de los consejeros internacionales de la campaña de Hillary por su temprana oposición a la guerra de Irak. También tienden a ser más liberales y subrayan el uso del "poder suave" (soft power) de la diplomacia y la ayuda económica para intentar conseguir los intereses de EE.UU., tal y como cuenta el Herald.
Este núcleo está dirigido por Susan Rice, asistente de la Secretaría de Estado para Asuntos Africanos en la administración Clinton, que ha presionado para dar una respuesta más dura a la crisis en la región sudanesa de Darfur, y Anthony Lake, el primer consejero en seguridad nacional de Bil Clinton, que fue criticado por el fracaso de la misma administración para afrontar el genocidio en Ruanda en 1994 y que reconoce ahora la inacción como un enorme error.
Otros miembros son Gregory Craig, un antiguo alto funcionario en el Departamento de Estado de Clinton, que formó parte de su equipo de abogados durante el 'caso Lewinsky'; Mark Lippert, antiguo asesor de Obama en el Senado, y el ya citado McDonough.
El grupo ya no incluye a Samantha Power, la ganadora de un premio Pulitzer que renunció en marzo tras llamar a Hillary Clinton "monstruo".
El rival republicano de Obama, el senador por Arizona John McCain, tiene un dispositivo mucho más pequeño, unas 75 personas en total, sin organizar en equipos. En 2004, el candidato demócrata, John Kerry, tenía un equipo asesor en materia internacional semejante en tamaño al de Obama, pero tenía una limitada influencia en el candidato, según cuenta el diario estadounidense, ya que había trabajado 20 años en el Senado.