Una ONG difunde un vídeo en el que soldados israelíes disparan a bocajarro a un civil palestino
- El palestino había sido detenido en una protesta
- Fue disparado con una bala de acero recubierta de caucho
- Las imágenes las grabó una niña de 14 años
- La ONG quiere denunciar con este vídeo el abuso de autoridad israelí
La organización israelí no gubernamental Betselem ha difundido un vídeo en el que aparece un soldado del Ejército israelí disparando a un detenido palestino maniatado y con los ojos vendados a corta distancia.
Según la organización de derechos humanos en los territorios ocupados palestinos, el incidente ocurrió el pasado 7 de julio en la aldea cisjordana de Nilín durante una protesta contra el muro de separación israelí, y tuvo lugar en presencia de otros soldados y oficiales del Ejército.
El disparo, de una bala de acero recubierta de caucho, fue hecho en presencia de un teniente coronel, que sujetaba al palestino por el brazo en ese momento, reza un comunicado de la ONG.
La víctima, un palestino que se manifestaba en la protesta e identificado como Ashraf Abu Rahma, de 27 años, fue detenido por soldados israelíes durante una media hora, tiempo en el que según el detenido, fue golpeado por los militares israelíes.
Tras su detención, un grupo de soldados y agentes de la Policía de Fronteras lo condujeron a un todoterreno militar.
El vídeo muestra al manifestante, que viste una camiseta de color verde, portando una bandera palestina y haciendo la señal de la victoria con la mano, y posteriormente aparece maniatado y con los ojos tapados con una venda. En las imágenes siguientes aparece un soldado israelí apuntando con un fusil contra las piernas del detenido a una distancia aproximada de 1,5 metros, y se aprecia cómo efectúa el disparo.
El detenido aparece luego tendido en el suelo y con una de las extremidades temblando.
Abu-Rahma dijo que la bala le impactó en su dedo pulgar izquierdo y que recibió tratamiento de un médico del Ejército, antes de ser liberado por los soldados.
Grabado por una niña
El suceso fue grabado por una palestina de catorce años desde su vivienda de la alea de Nilín. La organización israelí ignora si se han abierto diligencias contra los implicados en el suceso, sin embargo, residentes de la aldea palestina dijeron a la organización que vieron a los soldados implicados el día siguiente sirviendo en la misma unidad.
Tras la recepción de las imágenes, Betselem remitió de inmediato una copia al responsable de la Unidad de Investigación de la Policía Militar, exigiendo una investigación sobre lo sucedido y que los soldados sean llevados ante la justicia.