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El divorcio puede hacer que Europa vaya por primera vez oficialmente 'a dos velocidades'

  • España y otros siete países están dispuestos a recurrir a la "cooperación reforzada"
  • Suecia se opone a un proyecto porque teme que limite derechos a sus ciudadanos
  • La cuestión será tratada el viernes por los ministros de Justicia de los Veintisiete

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Varios países de la Unión Europea, entre ellos España, están dispuestos a recurrir por primera vez al procedimiento de la "cooperación reforzada" para aprobar la simplificación del divorcio entre ciudadanos de distinta nacionalidad y sortear así el veto de uno de sus países miembros, han informado fuentes de la presidencia francesa.

Concretamente, el país que se opone es Suecia, que no quiere que el nuevo marco legislativo suponga una merma de derechos respecto a su progresista ley del divorcio.

Para seguir adelante con el proyecto que permitirá a los cónyuges escoger la ley aplicable a su divorcio, España, Francia, Italia, Grecia, Luxemburgo, Austria, Hungría y Eslovenia están dispuestos a poner en marcha la "cooperación reforzada" que prevé en el artículo 43 el Tratado de la Unión Europea (en su versión consolidada, es decir, hasta el Tratado de Niza).

Otros cinco países, Alemania, Bélgica, Portugal, Lituania y Eslovaquia, están "pensando" sumarse a ese inédito procedimiento, han añadido las fuentes.

La cuestión será tratada en la reunión de ministros de Justicia de la UE el viernes en Bruselas.

La "cooperación reforzada", criticada por algunos analistas como ejemplo de una Europa a dos velocidades, puede acordarse si la Comisión Europea admite debatir una solicitud en tal sentido presentada por al menos ocho países y si luego la aprueban por mayoría cualificada los Estados miembros.

La nueva normativa europea sobre divorcio no pretende armonizar las legislaciones nacionales, que son muy variadas. Según los datos de Bruselas, cada año se producen en la Unión Europea 170.000 divorcios internacionales, el 16% del total.