La policía francesa investiga la muerte de un niño que apareció con 40 puñaladas
- Apareció sin vida en una calle de un pueblo del este de Francia
- Los padres han sido interrogados este miércoles, aunque no son sospechosos
Una cincuentena de gendarmes franceses investigan la muerte de un niño de 11 años que el pasado lunes apareció con 40 heridas de arma blanca en a localidad de Lagnieu, en el este del país. Los agentes han interrogado este miércoles a sus padres, aunque no son sospechosos.
Valentin pasaba en Lagnieu, una localidad de 6.000 habitantes del este de Francia, las vacaciones en casa del compañero sentimental de su madre, aunque ambos se encuentran en proceso de separación. Al parecer, el lunes salió con su bicicleta y su cuerpo apareció hacia la medianoche del lunes, en una calle del centro del pueblo. Junto a él había rastros de sangre, que la policía trata ahora de identificar.
Según el fiscal del caso, Jean Paul Gandolière el cuerpo de la víctima presenta "unas 40 heridas de arma blanca, además de otra decena de heridas de defensa" en brazos y manos. Hasta 14 de esas heridas se encontraban en el tórax, "algunas de 10 centímetros de profundidad, probablemente provocadas por un cuchillo", ha añadido.
En cuanto a la sangre, "puede ser del niño, lo que nos llevaría a pensar que primero fue herido en otro lugar y que llegó por sí mismo al lugar en el que se le encontró. Puede ser del asesino, que resultó herido en la agresión y que dejó un rastro al abandonar la escena del crimen", han señalado fuentes próximas a la investigación.
En cuanto a sus padres, han sido interrogados "como simples testigos, para verificar donde estuvieron. Pero no hay pistas particulares que los impliquen", han señalado las mismas fuentes. "No hay ninguna sospecha sobre ellos", han añadido, concretando que se trataba de verificar "si Valentin había dejado algún documento que pudiera aclarar los hechos¿. Por el momento "se siguen todas las pistas" y nada permite indicar que Valentin conociera a su agresor.