Régine Debatty cuenta cómo convertir la obsesión por un blog en tu medio de vida
- Régine Debatty, autora del blog we make money not art, cuenta su experiencia en la Campus
- El blog, una "obsesión" a la que al principio dedicaba diez horas diarias
- "En lectores, me gusta la cantidad, pero prefiero la cantidad"
- Es una de las principales críticas de nuevas tendencias de arte
- Se queja de que hay países que ignoran a los blogueros como comunicadores
Contra lo que el nombre de su blog podría dar a entender -we make money not art (Hacemos dinero, no arte)-, Régine Debatty subraya que es "muy mala haciendo dinero", porque el blog es, para ella, más que un modo de ganarse la vida, "mi bebé" y "una obsesión" a la que al principio dedicaba diez horas diarias.
"Odio escribir para otra cosa que no sea mi blog, pero debo hacerlo porque por lo visto no gano tanto dinero como debería", según quienes la acusan de ser poco profesional, poco empresarial, dice. Pero es que su blog es "una cosa muy, muy personal", en el que "el tema soy yo, aunque suene muy pretencioso".
Debatty ha estado este jueves en la CampusBlog de Campus Party para contar "cómo bloguear destruyó mi vida", que es como ha titulado una conferencia-coloquio que ha consistido en contar su trayectoria bloguera. El blog que regenta es actualmente el número 51 en el ránking mundial de Alianzo y uno de los más importantes en nuevas tendencias de arte.
Un cuento de hadas blóguico
Nacida belga, estudiante de Latín y Griego, ha residido en cinco países europeos (actualmente vive en Berlín) y ha sido directora de documentales en la televisión belga, además de profesora de lenguas clásicas y consultora para el proyecto MEDIA de la Comisión Europea en Italia.
Fue allí precisamente donde descubrió los blogs y creó el suyo para archivar toda la información que iba acumulando sobre arte y artistas que usaban nuevas tecnologías, afición que había nacido de las horas muertas en la oficina. La recomendación de crear el blog vino de un artista -ahora su novio, "aunque esa es otra historia"-, y en un principio ella era reacia, por considerarlo algo adolescente.
"Se convirtió en mi verdadera obsesión", resume. Y cuando Debatty la califica de obsesión sabe de lo que habla. Es "muy intensa" y cuando algo le gusta, una comida, por ejemplo, es capaz de comerla cada día, sea calabaza o salmón, que es su actual manía gastronómica.
La historia de Régine Debatty es la de quien terminó triunfando, con un blog que logró atraer una audiencia inmensa con dispositivos que unían lo tecnológico y lo artístico, aunque más cercano al gadget que a la obra de arte.
Cuando decidió especializarse en arte hecho con nuevos medios, más que en gadgets de toque artístico, los lectores dejaron de crecer, "pero prefiero la calidad a la cantidad", aunque eso supusiese también que los anunciantes perdiesen interés.
De arte y tecnología pasó a arte hecho con tecnología, y de ahí a añadir el arte tradicional... ¿Y ahora? "Pienso que es más mi sitio personal".
Blogueros maltratados
Como crítica de arte incluyendo colaboraciones para revistas especializadas, Debatty se queja de lo ninguneados que son los blogueros en algunos sitios. Destaca que en Estados Unidos pasa menos, pues cuando acude a una exposición como crítica, se percatan del interés que suscita su blog y es tratada como una periodista más.
En España, afirma, también hay una mentalidad abierta al respecto. Pero en lugares como Francia o Italia "están considerados como inferiores a seres humanos".
Reconoce que está aprendiendo a equilibrar su vida personal y su dedicación al blog: "antes iba mucho al cine; ahora no voy". Ahora sólo dedica cuatro o cinco horas diarias al blog durante la semana y el resto del día a asistir a exposiciones y hacer contactos; el fin de semana es cuando más dedica a escribir en el blog.
Eso sí, el dinero que le permite vivir lo gana con un blog de sexo (que ahora ha vestido de arte) en el que gasta diez minutos al día, aproximadamente.