La Sanidad británica no subvencionará varios fármacos contra el cáncer de riñón por ser caros
- Reconocen que son "eficaces, pero demasiado caros"
- Está probado que estos medicamentos alargan la vida de los pacientes
- Ha causado la polémica en el Reino Unido porque tendrá un "impacto devastador"
El Sistema Nacional de Salud británico (NHS) ha causado este jueves polémica al anunciar que dejará de facilitar a los enfermos de cáncer de riñón cuatro fármacos que pueden prolongar su vida, con el argumento de que resultan demasiado caros.
Grupos de pacientes que sufren la enfermedad afirmaron que la decisión, que ha tomado el regulador Instituto Nacional de Sanidad y Excelencia Clínica (NICE) y se aplicará en Inglaterra y Gales, condenará a muchos a una "muerte temprana".
Las cuatro medicinas son Sutent, Avastin, Nexavar y Torisel y pueden alargar hasta dos años la vida de los pacientes de cáncer de riñón, aunque no curan la enfermedad si se encuentra en un estado avanzado.
El NICE considera que los fármacos suponen un gasto excesivo para el NHS, cifrado en 24.000 libras (unos 30.200 euros) por paciente al año, y no ofrecen una buena relación calidad-precio.
"Son eficaces, pero demasiado caros"
"Aunque estos fármacos son clínicamente eficaces, lamentablemente en términos de costes no pueden ser asumidos por los recursos del NHS", dijo el profesor Peter Littlejohns, director del NICE.
Pat Hanlon, de la organización Kidney Cancer UK, dedicada a la lucha contra el cáncer de riñón, señaló que la decisión tendrá "un impacto devastador en los pacientes".
En opinión del profesor John Wagstaff, del Instituto de Cáncer del Sur de Gales, "esta decisión significa que el Reino Unido tendrá los peores índices de supervivencia (ante ese tipo de cáncer) en Europa".
James Whale, un conocido locutor británico de radio al que se le diagnosticó cáncer de riñón en 2000, indicó que fármacos como Sutent han proporcionado a muchas familias "esperanza para el futuro", y urgió al NICE a cambiar de parecer.
La Sanidad británica diagnostica cáncer renal a más de 7.000 personas cada año, de las que 1.700 llegan al hospital con el mal en estado ya avanzado.