Este año la lluvia de estrellas no será tan visible

• El fenómeno de las Perseidas se producirá el mediodía del martes
• Este año, la lluvia de estrellas se adelanta un día por ser bisiesto
• Los expertos recomiendan estar en lugares despejados para observarlo

Comienza la noche de las "Perseidas"

El conocido fenómeno de lluvia de estrellas del verano, denominado las Perseidas o Lágrimas de San Lorenzo, que este año, por ser bisiesto se adelante un día, no será muy visible en esta ocasión. La razón es que el momento de máximo apogeo será el mediodía del martes.

Entre las 13:30 y las 16:00 en la Península. Ese será el momento preciso en el que se estima una media de 100 estrellas fugaces por hora. Sin embargo, no podrá ser apreciable por  culpa de la luz solar.  No obstante, durante la noche del 11 al 12 de agosto, el fenómeno sí que podra verse, aunque con menor intensidad, desde gran parte del territorio español, salvo en el norte de España.

El mejor instante de observación será a última hora de la madrugada del martes, entre las cinco y las seis. Es en este momento cuando la constelación de Perseo se encontrará en la parte más alta del horizonte. Esta constelación, situada al noreste, es la zona del cielo desde la que, por efecto de la perspectiva, parece proceder la 'lluvia'.

¿Cómo se forma una lluvia de estrellas?

Las llamadas "estrellas fugaces" son en realidad pequeñas partículas de polvo de diversos tamaños, asociadas a restos de materia que los cometas van dejando a lo largo de su órbita en sus sucesivos pasos alrededor del sol. Esta corriente de partículas tarda 20 días en llegar a la Tierra; algunas de ellas entran en la atmósfera a gran velocidad y se desintegran, dejando un trazo luminoso que forma la lluvia de estrellas.

Se trata de un episodio anual que se produce porque la órbita de la Tierra pasa por una zona en la que hay restos del cometa Swift-Tuttle, que ahora se encuentra más allá del planeta Urano.

Recomendaciones para observar el fenómeno

El asistente técnico del Planetario de Madrid, Juan Antonio Bernedo, asegura que "la mejor forma de disfrutar de la lluvia es la observación a simple vista, sin telescopio ni anteojos de ningún tipo, ya que es preciso abarcar el máximo campo de visión. Cualquier punto de observación es bueno, siempre que ofrezca un horizonte y no tenga luces brillantes cerca".

Entre otras recomendaciones para la noche de las Perseidas, Bernedo aconseja a los aficionados acudir a lugares alejados de la ciudad, sin luz, para que los ojos se acostumbren a la oscuridad, que es desde donde mejor se puede apreciar el fenómeno. 

Una lluvia observada desde todo el mundo

De nuevo, los aficionados se sumarán a los profesionales astrónomos de todo el mundo, que se encargarán de enviar los datos que se registren a la Organización Internacional de Meteoros (IMO) para futuras previsiones

Los lugares del mundo más óptimos para contemplar el fenómeno se sitúan en torno al norte del Océano Pacífico, el extremo oeste de Norteamérica y este de Japón y China; en gran parte del hemisferio sur no podrá ser observado.

Las Perseidas son las más conocidas debido a la época del año en la que se producen, aunque a lo largo de todo el año hay más de cuarenta lluvias periódicas de diferente intensidad, como las Gemínidas que tienen lugar en diciembre y son bastante llamativas, o las Leónidas que se dan a mediados de noviembre.