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Diez soldados franceses mueren en Afganistán en combate con los talibanes

  • Los insurgentes les tendieron una emboscada tras combatir desde el lunes
  • Es el ataque más grave sufrido por Francia en Afganistán
  • Sarkozy reforzó este año las tropas desplegadas en el país
  • El presidente ha anunciado que viajará a la zona al final del día

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Francia pierde diez soldados en Afganistán

Diez soldados franceses han muerto en combate con los talibanes en Afganistán. Es el ataque más sangriento sufrido por el Ejército francés desde 1983, año en el que 58 paracaidistas murieron en un atentado en Beirut.

Los soldados combatían desde el lunes con los rebeldes a unos 50 kilómetros al este de la capital Kabul. Fuentes de la ISAF, la fuerza internacional comandada por la OTAN para imponer la seguridad en Afganistán, habían indicado que se estaba librando una "gran batalla" en la zona, concretamente en el distrito de Sarubi.

Los soldados murieron en "una emboscada tendida por los talibanes" tras combatir durante toda la noche y en el ataque otros 21 militares resultaron heridos según un comunicado de la Presidencia francesa.

Es el primer ataque mortal desde que el presidente Nicolas Sarkozy ordenó este año el refuerzo del contingente francés en Afganistán, hasta unos 3.000 efectivos, en respuesta a la petición de Estados Unidos.

Sarkozy ha anunciado que viajará al final del día a Afganistán para homenjear a los fallecidos. "En su combate contra el terrorismo, Francia acaba de ser duramente golpeada", ha dicho Sarkozy en un comunicado difundido por el Elíseo.

Hasta ahora Francia había sufrido 14 bajas desde que comenzó la operación en el año 2002, después de la invasión estadounidense para desalojar a los talibanes del poder.

Unos 3.000 soldados franceses están desplegados principalmente en la provincia de Kapisa, al noreste de Kabul (centro). Los militares españoles están en una zona menos conflictiva, al oeste del país.

Desde principios de año 176 soldados extranjeros han perdido la vida en Afganistán, la mayoría víctimas de artefactos explosivos. Los enfrentamientos violentos han redoblado su intensidad desde hace dos años pese a la presencia de 70.000 militares que forman parte de dos fuerzas multinacionales, una de la OTAN y otra bajo mando norteamericano.