La fundación Oso Pardo denuncia que ha retirado 153 lazos-trampa este año
- La Fundación Oso Pardo ha retirado 1.308 lazos-trampa desde su fundación
- Los lazos-trampa se utilizan para impedir que corzos y jabalíes pasen a las zonas de cultivo y como trampas
- Quince tramperos han sido denunciados en los últimos años
Según ha declarado a RTVE.es el Presidente de la Fundación Oso Pardo, Guillermo Palomero, desde la creación de la entidad, en 1993, se han retirado 1.308 lazos. De estos, 153 se han encontrado este año en los territorios comprendidos en la cordillera cantábrica occidental, que es el mejor núcleo de población de los osos.
Precisamente, en uno de estos lazos trampa fue apresado un oso pardo cantábrico hace días. El oso, que consiguió desembarazarse de la trampa, no logró sin embargo desprenderse del cable que le rodeaba el abdomen, por lo que un equipo de unas diez personas lleva días buscando al animal con el fin de liberarlo y curale las heridas, algo que, pese a que el animal fue visto por última vez hace dos días, no ha sido posible.
"El empleo de lazos-trampa ha sido algo tradicional en estas tierras", ha asegurado Palomero, pero el "fin ha sido otro", ya que lo que se buscaba era atrapar o impedir que corzos y jabalíes destrozaran los campos de cultivo. Por esto, lo más problable es que el lazo que lleva el oso huido lo haya puesto alguien que no pretendia cazar un oso, ha expresado Guillermo Palomero.
Pero los osos transitan las mismas veredas que los demás animales, por lo que es muy fácil que caigan en la trampa, máxime ahora, cuando se calcula que la población de osos ronda los 130 ejemplares.
"Cada vez se quitan menos... pero siguen siendo demasiadas", ha afirmado Guillermo Palomero refiriéndose a este tipo de trampas. Pese a estar totalmente prohibido por la legislación y ser considerado un delito penal, Palomero ha declarado a RTVE.es que, en los últimos años, la fundación ha denunciado a quince tramperos, doce en la comunidad de Castilla y León, y tres en Asturias.
Palomero considera que "los cazadores sí están concienzados de la presencia del oso y de los beneficios que trae a esta tierra", ya que, de ser una población casi extinguida, ha pasado a tener una población aceptable.
Sin embargo, Palomero sí ve mucho peligro en los lazos y en otra mortífera novedad que están empezando a observar, y que consiste en el uso de veneno contra los lobos, con el que los osos también resultan perjudicados.
El Presiente de la Fundación Oso Pardo ha asegurado que "en los 15 años que lleva funcionando la entidad, sólo han podido encontrar dos osos muertos a tiros, uno posiblemente confundido con un jabalí, y otro en el que todo indicaba que sí era el objetivo del cazador.
Estado del oso
Palomino ha informado a RTVE.es que el oso herido lleva sin ser visto desde el pasado día 26, cuando los miembros del operativo pudieron ver al animal comiendo bayas, lo que para el presidente es una buena seña, pues indica que continúa con su vida normal.
Además también ha informado de que tuvo una pequeña pelea con un oso más pequeño al que logró expulsar de su territorio.
"El problema estriba en que el animal se mueve en un terreno de muy difícil acceso, además con el oído y olfato tan sensible, enseguida localiza al equipo y se escapa", explica Palomero.
Desde entonces nada se sabe de él: "Estamos preocupados pues el oso lleva colgando una parte del cable, con el consiguiente riesgo de que cada vez se la ciña más en el abdomen, por lo que es vital que le atrapemos y curemos".