Científicos canadienses afirman que los lobos prefieren pescar a cazar

• Los investigadores observaron durante 4 años los hábitos alimenticios de los lobos 
• La seguridad y la nutrición podrían ser clave a la hora de decantarse por el pescado
• Gracias al estudio los científicos han podido conocer más características de los salmones

Un estudio llevado a cabo por científicos de la Universidad Canadiense de Victoria ha permitdo conocer, gracias al seguimiento de los hábitos alimenticios de los lobos, cómo estos animales prefieren pescar a cazar, de tal manera que entre un sabroso ciervo y un salmón se inclinarán por lo segundo.

El estudio, publicado en la revista BMC Ecology, afirma que aunque durante la mayor parte del año los lobos tienden a alimentarse de ciervos y otros mamíferos, en el otoño, cuando abundan los salmones, se cambian a una dieta de pescado.

Para poder hacer estás afirmaciones, el equipo de la universidad, encabezado por Chris Darimont, observó a los cánidos en una zona remota de la Columbia Británica y analizó los restos de presas en sus heces y la composición química de su pelaje durante los periodos de muda para determinar sus preferencias alimentarias en distintas épocas del año.

"Uno podría pensar que los lobos se decantarían por el salmón sólo en caso de escasez de ciervos, pero nuestros datos demuestran que no es así", han indicado los  autores.

Al contrario, "la elección del pescado se explica por factores relacionados con la seguridad, la nutrición y la energía", han afirmado los investigadores.

"Tiene sentido seleccionar a presas inofensivas como los salmones desde el punto de vista de la seguridad, ya que cuando cazan ciervos los lobos se exponen a sufrir heridas graves e incluso mortales", ha señalado Darimont. A esto se unen los beneficios nutritivos del salmón en materia de grasas y energía, añadió.

El estudio no sólo ha servido para conocer mejor a los lobos sino también a los salmones, cuyas migraciones oceánicas han impregnado ecosistemas terrestres enteros y son equiparables en Norteamérica a las migraciones de los ñus que nutren la cadena alimentaría en el Serengeti africano, según Thomas Reimchen, coautor del estudio.

Sin embargo los científicos han advertido de las amenazas que pesan sobre esta especie, entre ellas la sobreexplotación pesquera, la destrucción del hábitat donde los salmones desovan, así como las enfermedades derivadas de la salmonicultura de especies exóticas.