Tres detenidos en Perú por extorsionar a empresas españolas con un sello falso de ETA
- Los detenidos utilizaban correos con el sello falso de ETA
- Las cartas incluían insultos, amenazas y mostraban fotografías de cadáveres
- Se recibieron más de 50 denuncias por parte de empresarios españoles
Agentes de la Policía Nacional han detenido, junto a la Policía Nacional de Perú, a tres ciudadanos peruanos acusados de extorsionar de forma reiterada a empresas españolas mediante correos con el sello falso de ETA, según la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil.
La operación, denominada "Clínica", ha sido llevada a cabo por la Policía Nacional, en colaboración con la peruana, y entre los detenidos se encuentra Edward Alexis F.R., de 34 años, a quien se le intervino en su domicilio de Lima un terminal telefónico que era utilizado con el fin de reclamar el dinero. Los otros dos arrestados son Wilberto Froylan B.F., de 39 años, y Edsel German F.R., de 33.
Insultos, amenazas y fotos de cadáveres por correo
La investigación policial comenzó el pasado día 14 de julio, cuando se recibió en una clínica de estética española un mensaje en el que se solicitaba un depósito de 3.000 euros bajo amenazas al propietario y a su familia en nombre de la banda terrorista ETA.
A ese primer correo le siguieron otros tantos en el mismo sentido dirigidos a empresas de transporte, hoteles, etc. Las cartas incluían insultos, elevaban el tono de las amenazas e incluso iban acompañadas de una colección de fotografías de cadáveres.
Las misivas exigían la remisión del dinero demandado desde oficinas de una conocida entidad dedicada a envíos de dinero al extranjero. Así, se recibieron más de 50 denuncias por parte de empresarios españoles.
Colaboración policial
Una vez descartada la autoría de ETA, gracias a la intervención de la Comisaría General de Información, el Grupo de Secuestros y Extorsiones encabezó las investigaciones. Los agentes averiguaron desde un primer momento que el lugar de procedencia de dichos mensajes era la ciudad de Lima (Perú).
Por tal motivo, se inició a través de Interpol una estrecha cooperación con la Policía Nacional del Perú, concretamente con la División de Investigación de Secuestros, competente también en caso de extorsiones, así como la División de Investigación de Alta Tecnología.
Así, dos funcionarios del Grupo de Secuestros y Extorsiones de la Policía Nacional española, expertos en negociación policial, se trasladaron a principios del mes de agosto hasta Lima con el objeto de colaborar con dichas autoridades policiales peruanas para el total esclarecimiento de los hechos.
Intensifican las amenenazas
Una vez en Lima, se localizó la ubicación exacta de los terminales informáticos desde los que se remitían los mensajes amenazantes, todos ellos de diversos locutorios-Internet circunscritos a un distrito del norte de la ciudad, llamado "Los Olivos".
A medida que avanzaban los días, los extorsionadores intensificaban los intentos de cobrar el dinero reclamado bajo amenaza y para ello no dudaban en captar a través de la Red a sus víctimas simulando ser proveedores de productos de belleza que necesitaban realizar unos cobros en Madrid.
Dos de estos cobradores fueron interceptados por agentes del Cuerpo Nacional de Policía en Madrid cuando intentaban cobrar el dinero. Ambos declararon que habían sido contratados por un programa de mensajería instantánea a través de Internet por parte de una empresa de belleza que les instaba a cobrar pedidos en varias ciudades españolas.
Se destapa la trama
Paralelamente en Perú, tras un mes de investigación, el cerco sobre los presuntos autores se cerraba. Tras un estricto control de los extorsionadores por parte de los negociadores españoles trasladados hasta Lima, y gracias al intenso seguimiento de las direcciones IP desde las que se remitían los mensajes, el pasado 28 de agosto fueron arrestados tres ciudadanos peruanos como presuntos autores de la extorsión masiva en nombre de la banda terrorista ETA.
Las detenciones se produjeron en un locutorio sito en la citada zona de los Olivos. Los arrestos fueron realizados por funcionarios de la Policía Nacional del Perú, en colaboración con los agentes españoles allí trasladados.
Se les detuvo en el mismo instante en que remitían, desde el citado locutorio, varios mensajes amenazantes con la intención de cobrar dinero, así como en posesión de diversa documentación que les implicaba en la extorsión.
En el registro domiciliario practicado se intervino al primero de los detenidos un terminal telefónico que en última instancia era utilizado por la banda extorsionadora con el fin de reclamar el dinero.