Se hunde un 'barco-gasolinera' en el puerto de Tarragona y derrama 25 toneladas de fuel
- El 'barco-gasolinera' se ha hundido en el muelle Reus del puerto tarraconense
- El delegado del Gobierno en Cataluña dice que el vertido está controlado
- Joan Rangel afirma que el barco sólo ha vertido 25 toneladas de las 1.000 que llevaba
- La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, ha visitado el puerto tarraconense
- En la tarde del martes, la Generalitat ha declarado "controlado" el suceso
Un barco con capacidad para 1.000 toneladas de combustible se ha hundido esta mañana en el muelle Reus del Puerto de Tarragona sin que se hayan producido daños personales. El delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, asegura que el vertido está controlado y que sólo se han vertido 25 toneladas de las 1.000 que tiene en su interior.
Según ha informado a RTVE.es el Centro de Emergencias Nacional de Cataluña (Cencat), a las 06.48 se ha dado el aviso de que un barco destinado a suministrar combustible a otras embarcaciones se estaba hundiendo en el puerto. El barco no se ha hundido del todo, sino que tiene a la vista la punta de popa.
En un primer momento las autoridades han dispuesto sólo una barrera de contención en torno al barco, pero al detectar las primeras manchas se ha dispuesto una segunda barrera. Ha sido entonces cuando varias 'barcas-pelícano' (de recogida de residuos marinos) han comenzado a recoger fuel. Se está estudiando la posibilidad de reflotar el barco.
Al parecer, el barco transportaba 750 toneladas de fuel, 260 toneladas de gasoil y 3.000 litros de combustible de la propia nave. El fuel se habría derramado en la proporción indicada, unas 25 toneladas, mientras que el gasoil se habría evaporado tras caer al agua.
Un 'barco-gasolinera'
Según las informaciones de la autoridad portuaria, el barco, tipo 'gabarra' y destinado a suministrar carburante a otros buques, estaría hundido de popa y sólo quedaría la punta de proa en la superficie.
La Autoridad Portuaria de Tarragona (APT) y Salvamento Marítimo ya procedieron rápidamente al cierre de las barreras de contención y levantaron una doble barrera para cerrar toda la atarazana y evitar así posibles fugas del producto, a la vez que preparan la posible flotadura del barco en caso de que fuese necesaria. Enmarcado dentro del mismo dispositivo, se activaron las llamadas 'barcas Pelícano' que han trabajado en la recogida del producto derramado.
Vertido controlado
Durante la tarde del martes han empezado las operaciones de reflote del buque, que se espera que no sean demasiado complicadas. Por su parte, la Generalitat de Cataluña ha declarado el suceso "controlado" y, a través de su conseller de Interior, Joan Saura, ha destacado la rápida respuesta de las autoridades y los servicios de emergencia.
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, ha manifestado que los ciudadanos "pueden estar tranquilos" porque "el vertido está controlado y en manos de buenos profesionales que cuentan con medios necesarios y suficientes para dar una respuesta adecuada" ante una situación de estas características.
Álvarez ha añadido que la embarcación hundida, que se llama "Savinosa" y es la encargada de suministrar carburante a otros barcos, pasó en 2006 una inspección rutinaria y otra más a fondo en 2007, y que tenía todos los permisos "en regla", por lo que "nada" hacía pensar que se pudiese producir un accidente de este tipo.
No obstante, ha reconocido que el propietario del barco, cumpliendo con la normativa, pensaba cambiar la embarcación la tercera semana de octubre, ya que era monocasco. La ministra, que no ha hablado sobre las causas del accidente ni ha querido concretar la cantidad de combustible que se ha vertido, ha explicado que los buzos siguen trabajando "con muchas dificultades" para acabar de sellar un tanque cargado de combustible, mientras que se vaciará el contenido de otro.
Por su parte, las organizaciones ecologistas han reclamado que se invesigue a fondo el incidente.