Calatrava se defiende y afirma que el puente de Venecia es el más bonito que ha diseñado
- El puente ha sido inaugurado sin ninguna ceremonia por las polémicas
- El arquitecto afirma que su proyecto sí tenía acceso para minusválidos
- El ayuntamiento decidió cambiar el sistema por otro que todavía no ha sido instalado
- Al final, unos niños fueron los primeros en cruzar el puente
El arquitecto Santiago Calatrava ha asegurado que el puente que ha diseñado para Venecia, y que ha sido inaugurado sin ceremonia por las polémicas que ha suscitado, es el "más bonito que ha realizado".
Calatrava ha declarado su alegría porque "finalmente el puente es accesible a los venecianos", y su satisfacción por "las muestras de aprecio" de los ciudadanos.
El arquitecto valenciano se encuentra en Nueva York para seguir las obras de la nueva estación subterránea en la zona cero, donde se levantaba el malogrado World Trade Center.
Allí ha añadido que "es el más bonito entre todos los puentes que he proyectado". En una nota ha agradecido el trabajo de los obreros y artesanos que han colaborado para construir el puente y que "han demostrado ser los mejores del mundo".
Bautizado como Puente de la Constitución, la apertura se produjo anoche y reunió a muchos curiosos a pesar de que el consistorio no había hecho ninguna convocatoria oficial.
El Ayuntamiento, responsable
Como ya hizo el 2 de septiembre en una rueda de prensa en Venecia, ha puesto la pelota en el tejado del Ayuntamiento al afirmar "tenía previsto los accesos para los discapacitados físicos, dos plataformas a ambos lados del puente, pero tras la petición de las asociaciones de minusválidos el Ayuntamiento decidió sustituirlas por otro sistema".
Las novedades fueron adoptadas por el estudio de Calatrava, añade la nota, "y la estructura se dotó de los recursos necesarios para poder instalar el sistema previsto por el Ayuntamiento".
Una de las principales críticas que suscitó la construcción del puente y que ante las protestas empujaron al Ayuntamiento a cancelar la inauguración, fue que aún no se ha construido el sistema de acceso para discapacitados físicos.
Calatrava ha reiterado que su estudio "nada tiene que ver" con el proyecto sucesivo de la construcción de la plataforma para las sillas de ruedas del que se ocuparía el Ayuntamiento de la ciudad de los canales.
Respecto a la presunta fragilidad de la obra arquitectónica, Caltrava ha añadido que "el puente ha sido controlado y probado con métodos sofisticados que han establecido que su estructura es sólida y que responde mejor de lo previsto".
Sobre el aumento del presupuesto, otras de las críticas que rodearon al puente, el arquitecto especificó que 7 millones de euros se dedicarán también a la restauración de las áreas adyacentes a la plataforma como Plaza Roma y las orillas del Canal Grande.
El presupuesto inicial para el puente era de 7,2 millones de euros, pero finalmente su coste fue de 11,2 millones.
Los niños inauguran el puente
Anoche, los primeros en utilizar esta pasarela, que es el cuarto puente sobre el Canal Grande, y que une la estación de tren de Santa Lucía con el aparcamiento de Plaza de Roma, fueron un grupo de niños seguidos por varios centenares de venecianos y turistas que se encontraban en el lugar por casualidad.
"Espero que, ahora que se ha abierto, se pueda discutir de forma diferente", señaló la concejala de obras públicas, Marta Rumiz, para quien el puente de Calatrava "ha roto el tabú", porque supone un triunfo frente al inmovilismo arquitectónico de Venecia.
Rumiz dijo que, por ello, el puente tiene un extraordinario valor añadido para la ciudad, ya que hace que Venecia no esté sólo "vuelta hacia el pasado, sino también al presente y al futuro".
El Puente de la Constitución es una estructura ligera y flexible que mide 94 metros de largo y un ancho que varía entre los 5,58 metros y los 9,38.