La sonda europea 'Julio Verne' muere de éxito tras cumplir su misión

• Se ha desintegrado en la atmósfera tras aprovisionar a la Estación Espacial Internacional
• En el futuro, la agencia europea pretende llevar astronautas a la ISS
• A partir del 2010, la ISS no contará con la nave estadounidense para de estas misiones

Imagen que muestra el momento en el que la sonda europea Julio Verne se desintegra al entrar en la atmósfera.

El vehículo espacial europeo Julio Verne ha cumplido "con éxito" su primera (y última) misión: desintegrarse en la atmósfera tras llevar provisiones a la Estación Espacial Internacional (ISS).

Todo estaba previsto. La sonda, que había sido objeto de una maniobra final para sacarla de su órbita y provocar su desaceleración, ha penetrado en la atmósfera por encima de una zona totalmente deshabitada en el Pacífico Sur y ha desaparecido a 75 kilómetros de altura, según ha explicado la Agencia Espacial Europea (ESA). A los pocos minutos, sus fragmentos han caído en el océano.

El cohete europeo Ariane-5 lanzó este vehículo de carga el pasado 9 de marzo. Llevaba seis toneladas de provisiones y material para la ISS, a la que ha estado amarrado durante cinco meses. Les ha surtido de víveres, trajes, piezas de recambio y otros elementos.

Antes de desaparecer en la atmósfera, la Julio Verne se ha llevado 2,5 toneladas de residuos de la Estación.

"Un nuevo paso para Europa"

"Esta misión constituye un nuevo avance excepcional en un año rico en acontecimientos para los programas de los vuelos habitados de la ESA", ha subrayado la directora de este tipo de misiones de la agencia, Simoneta di Pippo.

"Europa ha dado un nuevo paso en el desarrollo de una capacidad que le permitirá poner en órbita carga y astronautas y volverlos a bajar a la Tierra, y que contribuirá a definir el futuro de los vuelos espaciales habitados, desde la ISS hasta las futuras actividades de exploración", argumentó.

La importancia del éxito de este vehículo espacial radica, entre otras cosas, en que a partir de 2010 la ISS no podrá contar con la nave espacial estadounidense.

La sonda que sustituirá a la desaparecida Julio Verne se está fabricando ya en una planta de EADS en Bremen (Alemania).