Análisis: ley de rescate, millones de salvación
El plan de rescate tiene mas de 400 paginas y ahora convertido en ley con la firma del presidente George Bush obliga y hace responsable al Tesoro de la que se considera una medida extraordinaria disponer de 700.000 millones de dólares ¿sin garantías de existo, porque es la primera que se promulga- y que tiene como objetivo comprar y sacar de los mercados las hipotecas basura.
La primera provisión de fondos, que salen de los impuestos cobrados a los contribuyentes, será de 250.000 millones dólares. Si fuese necesario añadir capital, el presidente dispone con su firma de 100.000 millones más, pero el resto que es la mitas de los 700.000 millones deberían ser autorizados de nuevo por el legislativo, senadores y representantes que al final añadieron otro pico de 100.000 a 150.000 millones de dólares para hacer mas fácil su aprobación.
El 20 de septiembre el secretario Paulson se presentaba con tres folios, hoy la ley tiene mas de 450 para dar satisfacción a quienes, pensando que la intervención era casi socialismo, debían taparse la nariz y justificar ante sus electores otras soluciones que contemplan hasta reducción de impuestos para pequeñas y medianas empresas y un regalo para los ahorradores estadounidenses, que de tener garantizadas en sus cuentas una cantidad de 100.000 dólares tendrá temporalmente y desde hoy un seguro de hasta 250.000.
Éstos son los puntos estrellas de una ley que tiene que escribir letra pequeña. Por ejemplo, tiene como previsión crear comisiones de seguimiento, prohibir que un sólo centavo vaya a pagar a directivos de Wall Street y eso sin olvidarnos de lo que será trabajos mas sofisticados como regulaciones y normas para evitar que una crisis como la ahora vivida pueda repetirse. Ni que decir tiene que sobre el papel, los dineros que aportan los contribuyentes serán restituidos al Tesoro¿ Pero el cuándo y el cómo no queda por escrito aunque si en el capitulo de la buenas intenciones.
Intenciones y palabras
Las buenas intenciones son por ahora esas muchas declaraciones que han salpicado desde primeras horas de la tarde ¿desde que la cámara de representantes daba su visto bueno- todos los medios de comunicación. Y como es lógico, escuchaban con doble intención en la bolsa neoyorkina tomando nota y analizando cada uno de los gestos de sus protagonistas.
La presidenta de la cámara, la demócrata Nancy Pelosi fue, sin ojeras y sonriente, la primera en romper el fugo y hablar de que una legislación como la que acababan de aprobar los representantes por 265 votos contra 171 marcaba pautas de futuro.
George Bush antes de firmar salía a los jardines de la Casa Blanca para felicitar y felicitarse por el esfuerzo que ponía potra vez en la línea de salida a la economía estadounidense, beneficiando con ello a los mercados internacionales.
Cuando Bush habló y dijo que las soluciones aplicadas no tendría efectos inmediato, la bolsa empezó hacer guiños extraños y de haber saboreado nueceros verdes, empezó a bajar y bajar para cerrar perdiendo mas de 157 puntos en el índice de los valores industriales. Un aviso y confirmación de que con la ley en la mano, tampoco tiene que entenderse que se ha dicho la última palabra.
La recesión asoma por debajo de la puerta y este viernes se ha confirmado que el paro ha seguido por noveno mes consecutivo sumando enteros¿ en este pasado mes de septiembre 159.000 parado más.