Descubren en Melilla a un inmigrante que intentaba cruzar a España oculto en el salpicadero de un coche
La Guardia Civil de Melilla ha descubierto a un inmigrante oculto en el doble fondo del salpicadero de un coche cuando pretendía cruzar la frontera con Marruecos. Completamente aprisionado en el salpicadero y en malas condiciones físicas, el hombre fue localizado en la Aduana de Beni-Enzar cuando los agentes del Instituto Armado procedían al control selectivo de un vehículo que accedía a Melilla procedente de Marruecos. Se trataba de un Daewo Lanos, de color blanco y matrícula marroquí, ocupado por una persona joven.
Según indicó una portavoz de la Benemérita, "al realizar los agentes actuantes una primera inspección ocular sobre la zona del maletero, tras su apertura, no se observó nada anormal, procediéndose a la apertura del capó donde apreciaron cierta irregularidad que les hizo sospechar, por lo que fue sometido a un exhaustivo registro". Ello llevó a los guardias a desmontar la zona del salpicadero donde localizaron un doble fondo muy bien construido.
Asimismo, estas fuentes indicaron que "todos los posibles huecos de acceso habían sido tapados para que no se pudiese ver el interior y ante la evidencia de que pudiese albergar a una persona se tuvo que proceder primero a su desmontaje y al comprobar que efectivamente dentro había una persona, inmediatamente a romperlo para poder extraerlo al peligrar su integridad física, ya que era tan hermético el habitáculo que en esas condiciones apenas podría coger aire".
Una vez arrancada esta parte del vehículo, observaron a una persona "completamente aprisionada" que fue ayudada a salir y que presentaba muy mal aspecto físico, con síntomas de entumecimiento en todo su cuerpo y respiración agitada por la falta de apertura alguna que permitiese la entrada de aire. Su estado era tan malo que se le tuvieron que administrar en el mismo lugar primeros auxilios y, posteriormente, fue evacuado en ambulancia al Servicio de Urgencias de un Centro de Salud de la Ciudad, donde fue estabilizado y asistido con diagnóstico de "mareos", de pronóstico leve, salvo complicaciones y alta médica.
El inmigrante encontrado, de origen subsahariano, es un varón, joven, que dice proceder de Eritrea, y que será puesto a disposición del Cuerpo Nacional de Policía a efectos de aplicación de la legislación vigente en materia de extranjería.
El conductor como único ocupante del vehículo, es un marroquí, natural y vecino de Nador, de 25 años de edad, que atiende a las iniciales B.Y. que, en calidad de detenido, pasará a disposición judicial como supuesto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, conocido coloquialmente como "tráfico de inmigrantes".