El GRAPO Israel Torralba desafía al tribunal que le juzga y llama "delincuente nazi" a la juez
- Torralba está acusado de delito de estragos terroristas en grado de tentativa
- Torralaba calificó al tribunal de "fascista" y llamó a la juez Murillo "delincuente nazi"
- El 10 de julio de 2000 colocó una bomba en una empresa de trabajo temporal
- Los Grapo revindicaron el intento de atentado el 8 de noviembre de 2000
El fiscal Pedro Martínez pide para Torralba diez años de prisión
El miembro de los GRAPO, Israel Torralba, se enfrentó hoy al tribunal de la Audiencia Nacional que le juzga por la colocación de una bomba en una empresa de trabajo temporal. Entre otros insultos, llamó "delincuente nazi" a la presidenta, la jueza Angela Murillo.
El altercado tuvo lugar al inicio del juicio, cuando se dio la palabra al acusado para las alegaciones iniciales. En ese momento, Torralba, visiblemente alterado, se quejó por haber conocido los hechos por los que se le acusa "esta misma mañana".
El acusado aseguró, alzando la voz sobre la de la jueza Murillo, que le llamaba a la calma, que esta circuntancias no es un hecho aislado. "Es la norma, nunca nos avisan", gritó el acusado.
La jueza Murillo ordenó a los agentes de la Policía presentes en la vista que se llevasen al acusado y lo trasladasen al cubículo acristalado habilitado en la Sala de vistas.
Entre forcejeos, Torralaba calificó al tribunal de "fascista" y, entre otros insultos, llamó a la juez Murillo "delincuente nazi", quien reiteró a los agentes su orden de trasladar al acusado a la sala blindada. "Ahí es donde tiene que estar", señaló la magistrada.
La vista no se reanudó hasta que los agentes depositaron en la sala acristalada al acusado, quien, más calmado, siguió el juicio en silencio.
En concreto, la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional juzga a Torralba por la colocación de una bomba en la sede de la empresa de trabajo temporal Laborman, en Madrid, en el año 2000.
El fiscal encargado del caso, Pedro Martínez, pide para Torralba diez años de prisión, al considerarle culpable de un delito de estragos terroristas en grado de tentativa.
Según el Ministerio Público, en la mañana del 10 de julio de 2000 este miembro de los Grapo colocó un artefacto explosivo en los lavabos de la empresa Laborman, situada en la avenida de Burgos de Madrid.Después de que una llamada de teléfono realizada por una mujer alertara a la Jefatura Superior de Policía de Madrid de la colocación de la bomba, los agentes desalojaron el inmueble en el que estaba situada la empresa de trabajo temporal y localizaron el explosivo.
Efectivos de los Tedax consiguieron desactivar el artefacto, que estaba formado por 760 gramos de un compuesto de hierro y aluminio y 40 gramos de pentrita. Los Grapo revindicaron el intento de atentado el 8 de noviembre de 2000, a través de un comunicado remitido a distintos medios de comunicación.