Las marcas Lois, Cimarron, Caroche y Caster, en 'liquidación' por culpa de la crisis
- La textil Sáez Merino ha presentado la solicitud de liquidación en el Juzgado
- La empresa tiene dos plantas, en Valencia y Ciudad Real, con 350 trabajadores
- Los sindicatos acusan a la firma de mala gestión económica
- El próximo día 14 la dirección se reunirá con el comité de empresa para explicar lo ocurrido
Adiós a Lois y Cimarron. El grupo textil Sáez Merino ha presentado la solicitud de liquidación en el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Valencia al no poder cumplir con el convenio de acreedores acordado el año pasado, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitad Valenciana.
La textil, que comercializa las marcas Lois, Cimarron, Caroche y Caster, tiene dos centros de producción en Benaguasil (Valencia) y Daimiel (Ciudad Real) con alrededor de 350 trabajadores.
La dirección ha comunicado al comité de empresa que iba a presentar la liquidación, situación a la que ha llegado, según fuentes de UGT, por una mala gestión unida a una falta de liquidez y de dificultad de acceso al crédito.
Un portavoz de UGT ha indicado que la empresa no iba bien y no se descartaba que finalmente llegara a la liquidación, pero no se esperaba que fuera tan pronto puesto que había pedidos al menos en la misma cantidad que en la campaña anterior.
El próximo día 14 está prevista una reunión entre la dirección y el comité de empresa y los sindicatos, en la que éstos esperan explicaciones sobre los motivos que han llevado a presentar la liquidación.
Expediente de regulación de empleo
Según CCOO, la liquidación irá acompañada de un expediente de regulación de empleo de extinción que tendrán que negociar los sindicatos con los administradores concursales del anterior convenio de acreedores.
Si el juzgado acepta la solicitud de la liquidación, "habrá que ordenar todo el proceso de los pagos derivados después del convenio, ver los inmuebles hipotecados y las marcas para que los trabajadores salgan lo menos perjudicados posible", ha explicado un portavoz de CCOO.
En ese caso se encuentran los trabajadores afectados por el expediente de regulación de empleo presentado en abril de este año, que incluyó prejubilaciones y en el que se acordó pagar en plazos una parte de las indemnizaciones.