La muerte de Haider puede acelerar la reunificación de la ultraderecha de Austria
- Antes de morir, Haider (BZÖ) había hecho algunos guiños al líder del FPÖ, Strache
- Los dos partidos de ultraderecha lograron casi el 30% de los votos en las legislativa
- La Alianza de Haider podría desaparecer porque no tiene sentido sin él
- No hay ningún posible sucesor a la vista
La muerte en accidente de tráfico del ultranacionalista austríaco Jörg Haider este fin de semana podría acelerar la reunificación de la extrema derecha en Austria, aunque no hay un sucesor claro que pueda ser tan carismático como el fallecido para conseguirla.
Haider, líder de la Alianza para el Futuro de Austria (BZÖ), había hecho varios guiños en las últimas semanas al otro líder ultranacionalista, Heinz-Christian Strache, del Partido Liberal (FPÖ), del que se escindió el primero en 2005 tras fuertes disputas internas. Entre ambos partidos lograron casi el 30% de los votos en las elecciones legislativas celebradas el mes pasado en Austria.
La Alianza de Haider y el Liberal de Strache han conseguido explotar el descontento de las clases medias y rurales con las peleas de los partidos centristas en el poder, la inflación y la inmigración.
Y, según los analistas, la repentina muerte de Haider aumentaría las perspectivas de la reunificación entre ambos partidos, aunque no hay ningún posible sucesor a la vista.
"Esto (su muerte) elimina un obstáculo para la Alianza de reunificarse con el Liberal, porque la Alianza sólo tiene sentido en virtud de Haider", según Peter Pulzer, un experto en asuntos de Austria de la Universidad de Oxford.
No obstante, no se espera que los dirigentes de la Alianza vayan a precipitarse en la decisión de reunificarse. De hecho, la decisión podría demorarse hasta después de las elecciones regionales de Carintia del próximo año, según este analista.
Votantes de Haider
Pulzer pone el acento en una cuestión: muchos de los votantes de la Alianza se deben a la carismática personalidad de Haider -triplicó los resultados electorales en septiembre con un 11% de votos-, y no todos estos votantes tienen por qué secundar a un partido de extrema derecha reunificado.
"La mayoría probablemente se vaya a el Partido Liberal, pero no todos de ellos como Strache", según Pulzer.
En el año 2000, Haider llevó al Gobierno al FPÖ, con un 27% de los votos, en coalición con los conservadores, lo que suscitó la condena generalizada por parte de la Unión Europea y a aplicar sanciones a Austria. Después de encarnizadas luchas por el poder dentro del FPÖ, Haider formó en 2005 el BZÖ, de corte más moderado, que se mantuvo en el Gobierno, mientras que el FPÖ optó por una dura oposición.
Haider y Strache, los principales protagonistas de la amarga división, se reunieron informalmente la semana pasada en Viena, en una primera señal de acercamiento.
"El Partido Liberal está claramente interesado en la Alianza para crecer, y ahora el viejo adversario Jörg Haider se ha ido también. Sería posible un acuerdo sin que nadie pierda después de la muerte de Haider", según el analista político Peter Filzmaier.