Geólogos estadounidenses descubren miles de huellas de dinosaurios en el desierto de Arizona
- Los rastros dejados por patas y colas de los animales son de hace 190 millones de años
- Creen que pudieron concurrir cuatro tipos distintos de especies
- Al lugar podrían haber acudido en busca de agua
- En un primer momento, se pensó que la huella eran fruto de la erosión
Un grupo de geólogos de la Universidad de Utah han descubierto una concentración de miles de huellas de dinosaurios que pulularon en lo que fue un oasis en la frontera de los estados de Utah y Arizona hace 190 millones de años. Un comunicado de la universidad ha indicado que se trata de huellas de las patas y del rastro dejado por las colas de los animales.
Según los científicos, tanto las huellas como los rastros de las colas de los dinosaurios son una evidencia de intervalos húmedos y secos durante el Período Jurásico, cuando la zona del sudoeste de EEUU era un desierto.
Un informe sobre el hallazgo fue publicado en el número de octubre de la revista internacional de paleontología "Palaios". Las huellas fueron descubiertas en el Monumento Nacional Vermilian Clikks y al principio se creyó que eran agujeros creados por la erosión.
Los científicos de la Universidad de Utah indican que hay tantas huellas de dinosaurios que parece que los animales lo hubieran convertido en un "lugar de baile". Marjorie Chan, profesora de geología y geofísica de la universidad, manifestó que es posible que al lugar hayan acudido diversos tipos de dinosaurios para saciar su sed.
Al menos cuatro especies distintas de dinosaurios
"Era un lugar que atraía a toda una muchedumbre, una especie de salón de baile", manifestó. Según Winston Seiler, que participó en la investigación, la forma y el tamaño de las huellas indica que en el lugar se congregaban al menos cuatro tipos de dinosaurios.
"El tamaño diferente de las huellas, de 2,5 centímetros a unos 50 centímetros), nos puede decir que eran madres con sus crías", añade. En la región occidental de Estados Unidos se han descubierto varios lugares que fueron habitados por diversas especies de dinosaurios.
Sin embargo, según Seiler, en esos lugares las huellas no superaban la docena y "en esta superficie en particular hay más de mil".
Por otra parte, las huellas dejadas por las colas de los animales constituyen un descubrimiento especial porque hay menos de una docena de sitios similares en todo el mundo, añadió.
Chan visitó el lugar por primera vez en 2005 y pensó que los agujeros eran característicos de la erosión, "pero sabía que eso no era todo debido a la alta concentración y porque no había ningún otro lugar que tuviera una superficie similar", señaló.
Un año después el sitio fue visitado por Seiler, quien señaló que también al principio creyó que se trataba de agujeros de la erosión "pero después de cinco minutos de caminar por el lugar, me di cuenta que eran huellas de dinosaurios", manifestó.