El primer cosmonauta brasileño ve "factible" la llegada del hombre a Marte
- El cosmonauta brasileño alienta la innovación en la Campus Party Iberoamérica
- A su juicio, la inversión en tecnología permite luchar contra el subdesarrollo
"Si mi padre solo se hubiera ocupado de las necesidades básicas, yo no habría llegado a ser astronauta". Marcos Pontes, el primer y único astronauta brasileño, recurre con frecuencia a su vida personal -especialmente a su infancia- para ilustrar sus enseñanzas enla Campus Party Iberoamérica.
Un esfuerzo que para Pontes supone la búsqueda de desafíos constantes en la carrera espacial, señalando que la llegada del hombre a Marte "es factible", aunque ha matizado que necesitará de ingentes recursos, por lo que será un proyecto conjunto de varios países el que logre la hazaña.
"El escenario económico actual provoca ciertas dudas, pero yo espero que la investigación y los proyectos continúen adelante", ha comentado: "Es una cuestión fundamental".
Más inversión
El cosmonauta brasileño ha estado con los innovadores latinoamericanos defendiendo que la inversión en tecnología es la mejor manera de luchar contra el subdesarrollo.
Pontes, que desde su viaje de la Estación Espacial Internacional (ISS) en 2006 lidera la carrera espacial brasileña, ha insistido en este sentido en la necesidad de "invertir en futuro", pese al contraste que plantea la inversión en conocimiento frente a los problemas sociales que sufren la mayoría de los países iberoamericanos.
"Si no inviertes en futuro, vas a depender de la tecnología de fuera y esa dependencia va a ser cada vez más cara. La educación, la ciencia y la tecnología pueden ayudar a resolver los problemas sociales", argumenta Pontes.
Aplicaciones reales
Así, ha recordado que dos de los experimentos realizados en la ISS por la misión brasileña, sobre control de temperatura y tecnología de satélites, son ahora aplicaciones desarrolladas por empresas brasileñas, que permiten al país economizar recursos.
De la misma forma, Pontes insiste en que la tecnología permite ampliar la sociedad del conocimiento, no solo, por ejemplo, formando profesores en la Amazonia a través de aulas virtuales, sino favoreciendo el desarrollo personal que permita a los países en vías de desarrollo contar con líderes, primero en sus propias vidas y después en cargos de responsabilidad, que inicien un círculo virtuoso.
"Hoy en día, después de la misión brasileña, hay millones de jóvenes en Brasil que ven en la carrera espacial una oportunidad de trabajo. Se ha abierto un camino", asegura el astronauta, que ha instado a los asistentes a la Campus a buscar constantemente nuevos desafíos.