El CSIC logra frenar la mortalidad del águila imperial en el Parque de Doñana
- La mortalidad aumentó porque tenían que ir a cazar conejos a zonas con veneno
- Han calculado que el 61% de los ejemplares adultos murió envenenado
- Los investigadores colocaron cercados con conejos bajo los nidos de las aves
- Con esta medida consiguieron triplicar el número de pollos de águila imperial
- En 2010 quieren consolidar que haya entre 10 y 12 parejas reproductoras
- El estudio se ha publicado en la revista Journal of Applied Ecology
Consiguen reducir la mortalidad del águila imperial. Los investigadores de la Estación Biológica de Doñana, del CSIC, han logrado triplicar la producción de pollos de esta especie, el águila más amenazada de Europa.
Los autores, Miguel Ferrer y Vicenzo Penteriani, han publicado las técnicas que han utilizado en un artículo que es portada de la revista Journal of Applied Ecology. En él explican los detalles del plan de recuperación que se puso en marcha en 2006 y que concluirá en 2010.
Los investigadores, según ha explicado Ferrer a Efe, registraron un aumento de la mortalidad de esta rapaz en Doñana, que pasó del seis al 12,1%. El mayor número de fallecimientos obedecía a la falta de su principal alimento, el conejo, lo que les obligaba a campear en zonas no protegidas, en cotos donde se utilizaba veneno.
Los científicos comprobaron que el 61% de los adultos de esta rapaz muertos fallecieron por envenenamiento.
También constataron que la elevada mortalidad que esta especie padeció en Doñana entre 1992 y 2004 no se tradujo en un aumento de la producción de pollos de águila, como ocurre generalmente en la naturaleza, sino que este mecanismo de regulación se invirtió.
Según las formas de regulación de las poblaciones que se dan en la naturaleza, cuando una población decrece en exceso, la fecundidad aumenta para recuperar densidad, y al contrario.
De 16 a sólo siete parejas de águilas
Por ello, la población de águila imperial en Doñana se redujo desde las 15 ó 16 parejas habituales de la zona durante la última mitad del siglo XX a sólo siete parejas.
Ante esta situación, los científicos del CSIC colocaron cercados con conejos bajo los nidos de águila imperial de Doñana, con lo que redujeron las salidas de estas rapaces fuera del espacio protegido.
De esta forma se redujeron las muertes por envenenamiento y aumentó la producción de pollos que ha pasado en los últimos tres años de 3,5 a 10,5 individuos.
La mortalidad a tasas normales
Según Ferrer, los resultados de esta actuación, que finalizará en 2010, han permitido que la mortalidad del águila imperial en Doñana haya vuelto a tasas normales, gracias al aporte sostenido de conejos vivos en los territorios en los que nidifican esta rapaz y a los planes para la erradicación del uso de venenos.
Los objetivos finales del proyecto son consolidar en 2010 un mínimo de entre diez y doce parejas reproductoras que generen entre nueve y catorce pollos al año.
La población de águila imperial ibérica se ha duplicado en Andalucía en los últimos ocho años al pasar de 26 parejas en 2001 a las 55 censadas este año, con lo que esta comunidad autónoma mantiene el 25% de los ejemplares de esta especie, en peligro crítico de extinción, según datos de la Consejería andaluza de Medio Ambiente.