La reunión del G20 reclama unidad de acción y reformas en el FMI y el Banco Mundial
- Proponen acciones conjuntas y la plataforma del G20 para liderar la lucha anticrisis
- Aseguran que es preciso reformar el FMI y el Banco Mundial
- La semana que viene, la cumbre de Washington completará el trabajo hecho en Brasil
Los países del G-20 han concluido hoy su reunión anual con un consenso sobre la necesidad de enfrentar la crisis internacional de manera conjunta, pero sin una propuesta concreta sobre la mayor regulación de los mercados financieros y otros asuntos planteados.
"Vamos a desarrollar a lo largo de la semana una agenda de propuestas para llevar a la reunión de Washington" el próximo sábado, ha dicho en una rueda de prensa el ministro de Hacienda de Brasil, Guido Mantega.
Según Mantega, el G-20, formado por las mayores economías del mundo, entre desarrolladas y emergentes, ha salido de esta reunión de ministros de Finanzas y presidentes de los bancos centrales como "fuerte candidato" para ejercer la función de coordinador mundial de las acciones contra la crisis.
"Salgo convencido de que el mejor instrumento para enfrentar esta crisis es el G-20", explicó Mantega en la rueda de prensa, a la que también compareció el ministro de Finanzas de Sudáfrica, Trevor Manuel.
"Vamos a desarrollar a lo largo de la semana una agenda de propuestas para llevar a la reunión de Washington", ha señalado el ministro brasileño.
Ha agregado que esa cita de jefes de Estado o de Gobierno del G-20 tendrá el "poder político" para definir una "propuesta ambiciosa" de cambios en la regulación de los mercados y en la reforma de los organismos multilaterales, pero aclaró que decisiones en ese sentido pueden tardar "uno, dos o tres meses". Por eso, ha subrayado que "la crisis no puede esperar las reformas" y a manera de ejemplo dijo: "Vamos a tener que cambiar la rueda del coche con el coche en movimiento".
Mantega ha apuntado que "hay material suficiente para un avance en las propuestas de regulación" de los mercados y mencionó la "total concordancia" en la necesidad de que cada país adopte "políticas anti-cíclicas (fiscales y monetarias) de acuerdo a sus posibilidades para enfrentar la crisis".
"Las medidas tomadas no deben amenazar el equilibrio monetario y la situación inflacionaria de los países", advirtió, sin embargo, el titular brasileño de Hacienda, quien ha matizado que con la recesión mundial que puede ocurrir en 2009, "el peligro mayor es de deflación y no de inflación".
Reformar las instituciones financieras
Los mismos conceptos fueron anotados en un comunicado conjunto de 17 puntos emitido al término de la reunión, en el que, además, se destaca que las instituciones de Bretton Woods (el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial) deben reformarse para que reflejen los cambios económicos del mundo y puedan "responder a desafíos futuros".
En ese sentido, el texto subraya que las economías emergentes deben tener "mayor voz y representación en esas instituciones".
Sin embargo, los ministros reconocieron que esa no será una tarea fácil porque algunos países se resisten a reducir sus cuotas de poder en el FMI, el Banco Mundial y otras instituciones como el G-7.
"Hay resistencia de países avanzados en el pequeño club del G-7 porque no quieren perder posiciones", ha dicho Mantega, quien no obstante ha destacado que Francia, hablando en nombre de la Unión Europea (UE), ha mostrado en las reuniones en Sao Paulo mayor disposición a esa apertura.
Por su parte, Manuel, el ministro sudafricano se ha referido al G-7 como un "club pequeño" y ha enfatizado que "los emergentes deben ser parte de la solución" a la crisis actual.
El G-20 está formado por los países del G-7 (EE.UU., Canadá, Japón, Alemania, Reino Unido, Italia y Francia), además de Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, China, Corea del Sur, India, Indonesia, México, Rusia, Sudáfrica y Turquía, más la Unión Europea (UE) como bloque.
Sobre las propuestas que se esperaban para la cumbre de gobernantes del G-20 que se celebrará el próximo sábado en Washington, Mantega dijo que "es difícil entrar en detalles".