El Big Bang del siglo XXI no arrancará hasta verano
- El motivo es una avería que sufrió a mediados de septiembre
- James Gillies, el portavoz del CERN, ha asegurado que no podrá funcionar en primavera
- El 12 de diciembre los científicos evaluarán la situación del LHC
Enlaces relacionados
El acelerador de partículas del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) no volverá a arrancar antes del verano de 2009, después de la avería que sufrió a mediados de septiembre, según ha informado el organismo. El 12 de diciembre los científicos evaluarán su situación.
El portavoz del CERN, James Gillies, ha confirmado los rumores que habían aparecido en la prensa alemana de Suiza, que aseguraban que la fecha apuntada de la próxima primavera para volver a poner en funcionamiento el Gran Colisionador de Hadrones (LHC, por sus siglas en inglés), no es realista.
"Será en verano, más que en primavera", ha afirmado el portavoz, quien dijo que el 12 de diciembre el consejo del CERN hará una evaluación de la situación.
El proyecto estrella del CERN, el mayor acelerador de partículas del mundo, funcionó por primera vez el 10 de septiembre, cuando los científicos del laboratorio lograron que el primer haz de protones circulara y diera una vuelta completa por el gigantesco túnel de 27 kilómetros de circunferencia que constituye el acelerador, situado bajo la frontera suizo-francesa, a las afueras de Ginebra.
Fallos en el acelerador
Diez días después del 'estreno' del Big Bang del siglo XXI, una avería en uno de los ocho sectores que conforman el acelerador obligó a parar el experimento.
Lo último que se supo sobre las causas de la avería del LHC es que se debió a un fallo humano. Al parecer, una ensambladura que no estaba bien colocada provocó el problema.
A pesar de la avería, el CERN celebró una inauguración oficial del acelerador el pasado 21 de octubre, aunque deslucida por la ausencia de grandes personalidades.
'Prisas' del director general
Diversas informaciones aparecidas en la prensa suiza culpan ahora, en parte, de la avería, a las 'prisas' del director general del CERN, Robert Aymar, quien habría querido arrancar el acelerador a toda costa antes de que finalice su mandato este año, sin que se hubieran hecho todas las pruebas necesarias.