La Mesa del Congreso da marcha atrás y decide por unanimidad no homenajear a Santa Maravillas

• Todos los grupos de la Mesa, incluido el PP, revocan el homenaje a la religiosa
• La Mesa del Congreso aprobó dedicarle una placa a instancias del Partido Popular
• Bono reconoce que pudo ser una decisión "errónea", pero niega "mala intención"
•  La religiosa fue perseguida en la guerra civil y canonizada en 2003 por Juan Pablo II
• El homenaje había suscitado las críticas de los partidos de izquierda, incluido el PSOE

Al final Sor Maravillas no tendrá una placa con su nombre en el edificio del Congreso

La Mesa del Congreso ha decidido, por unanimidad, reconsiderar su anterior decisión y no colocar una placa en la Cámara Baja en recuerdo de la Madre Maravillas. Lo ha anunciado el presidente del Congreso, José Bono, tras convocar una reunión de urgencia para zanjar lo que considera un "enfrentamiento" entre los grupos parlamentarios por el homenaje a la religiosa.

La decisión que el órgano rector de la Cámara baja adoptó el pasado 4 de noviembre se ha encontrado con la oposición frontal de Esquerra Republicana (ERC), ICV (Iniciativa per Catalunya), Izquierda Unida (IU) y el propio Partido Socialista. Alegaban que la medida vulneraba el principio de laicidad del Estado.

Tras una hora de reunión, el presidente del Congreso ha reconocido que la decisión de colocar la placa en memoria de Sor Maravillas pudo ser una decisión "errónea", pero en ningún caso cargada de "mala intención contra nadie".

En su opinión, las decisiones relativas a los reconocimientos personales deben ser asumidas "con carácter general" y siempre dejando claro que no existe intención de "molestar" a nadie.

"Personalmente, no me duelen prendas en decir que lamento que alguien haya entendido que el acuerdo iba dirigido a ofender un sentimiento religioso, o la ausencia de ese sentimiento, o la militancia laica. No se quiso hacer así y la mejor manera es proclamarlo con claridad y por unanimidad, y así se ha hecho", ha manifestado Bono.

El PP vota en contra de su propia propuesta

Bono ha precisado que el acuerdo se ha tomado por unanimidad de todos los miembros "de derecho" de la Mesa. Es decir, además de él, han decidido revocar la medida los vicepresidentes Teresa Cunillera (PSOE), Ana Pastor (PP), Jorge Fernández Díaz (PP) y Jordi Jané (CiU), y los secretarios Javier Barrero (PSOE), José Ramón Beloki (PNV), Ignacio Gil Lázaro (PP) y Celia Villalobos (PP).

El pasado 4 de noviembre, la Mesa del Congreso aprobó, también por unanimidad, colocar una placa en homenaje a la Madre Maravillas, una religiosa perseguida en la guerra civil y canonizada en 2003, que nació en un edificio que ahora pertenece a la Cámara Baja.

Precisamente, el homenaje había sido promovido por un diputado popular, el vicepresidente tercero de la Mesa, Jorge Fernández Díaz, que hoy ha votado a favor de revocar la medida que él mismo impulsó. El motivo que han esgrimido tanto Fernández Díaz como el propio Bono ha sido que la medida no ha contado con el respaldo colectivo "sine qua non" no se podía materializar la medida.

El diputado popular ha apoyado la revocación por "sentido común" y por "prudencia", y ha insistido en que su propuesta no tenía que ver nada con la laicidad del Estado, porque su pretensión era "seguir con los hechos y costumbres de Madrid de colocar placas evocando un hecho histórico".

Antes de comenzar la reunión de la Mesa, el propio Bono telefoneó a los portavoces de los grupos parlamentarios para comunicarles la revocación del acuerdo y, según explicaron a Servimedia fuentes parlamentarias, para solicitarles moderación en sus críticas.

Algunos grupos habían pedido formalmente a la Mesa que reconsiderara su acuerdo, y Bono les explicó que esa reflexión era a iniciativa de la propia Mesa, y no en respuesta a los recursos planteados.

Reunión urgente

El presidente del Congreso, el socialista José Bono, había decidido convocar una reunión urgente de la Mesa de la Cámara para volver a estudiar la propuesta de colocar una placa en dependencias parlamentarias en memoria de la Madre Maravillas después de la polémica que había suscitado el homenaje en los partidos de izquieda, incluido el propio PSOE.

En un comunicado hecho público este mediodía, Bono ha reconocido que este asunto ha generado una polémica y no ha sido entendido con el propósito, alejado de cualquier elemento confesional, que lo motivó, y apunta a una posible revocación.

"En realidad, lo que para unos es mérito para otros es agravio. En este clima, el acuerdo pierde su significación originaria", subraya, recalcando que este tipo de decisiones de la Mesa no deben de ser "motivo de enfrentamiento o malestar entre los parlamentarios".

Aunque estaba previsto que este asunto fuera discutido por la Mesa en su reunión ordinaria del martes próximo, Bono ha optado por adelantarla, según ha anunciado en una nota donde explica los pormenores de la decisión adoptada por la Mesa el 4 de noviembre.

En su nota, Bono recuerda que el homenaje tenía como objetivo "dejar constancia" de que en uno de los inmuebles de la sede parlamentaria, en concreto el sito en el número 36 de la Carrera de San Jerónimo, "vivió una familia entre cuyo miembros hubo dos presidentes del Congreso, uno del Senado y una hija de éste, Maravillas de Jesús, que alcanzó notoriedad por su canonización reciente".

"Los de partidos propios son unos hijos de puta"

Esta reunión de urgencia llega después de que José Bono haya tenido que disculparse por una conversación privada en la que criticaba la postura de algunos de sus compañeros con respecto al caso de la Madre Maravillas. En concreto, el presidente de la Mesa del Congreso afirmó ante un grupo de diputados populares que "hay mucha santa y algún malo... y los de partidos propios son unos hijos de puta". 

Poco después, Bono se excusaba: "Me han dicho que han dicho que una cámara me ha 'robado' unas palabras que, en un tono de broma informal, estaba comentando con unos diputados. Quiero decirles que no tengo el más mínimo ánimo de molestar a nadie", manifestó el presidente de la Mesa del Congreso.

Este miércoles, la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, ha aceptado sus disculpas en una entrevista concedida al magacín 'En Días Como Hoy' de Radio Nacional . En la misma línea, el diputado del PSOE por Madrid Juan Barranco se ha referido con ironía al 'robado' de Bono: "Si reza un Ave María, se le perdonará", ha afirmado Barranco.

Una polémica que ha dividido al Congreso

La decisión de colocar una placa en honor de la Madre Maravillas fue adoptada el pasado 4 de noviembre por la Mesa del Congreso a instancias del diputado del PP y vicepresidente tercero, Jorge Fernández Díaz.  La medida ha sido muy criticada por los partidos políticos de izquierda.

Uno de los más duros ha sido el portavoz de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, que ha llegado a tachar la medida de "delirante" y "barbaridad", porque, asegura, contribuye al "desprestigio" de la Cámara Baja. "Es una astracanada que forma parte del sainete y del género chico", ha dicho.

El malestar también se ha extendido a las filas socialistas. Este martes, un grupo de diputados del PSOE hizo llegar al portavoz del grupo parlamentario, José Antonio Alonso, su disconformidad con la actuación del presidente del Congreso, José Bono. Después, el propio Alonso admitió en una rueda de prensa que su partido se opondrá al homenaje a la religiosa porque vulnera el criterio de aconfesionalidad del Estado y porque carece del consenso necesario.

La placa pretendía recordar la figura de la madre María Maravillas Pidal y Chico de Guzmán, que nació en un edificio que ahora pertenece al Parlamento. Durante la guerra civil fue perseguida y encarcelada, aunque logró escapar. En 2003 el Papa Juan Pablo II la convirtió en santa.