Obama apuesta por el "sentido común" frente a la ideología para afrontar la crisis
- El presidente electo cree que es necesario un ejecutivo eficaz y sin partidismo
- Hace un llamamiento al Partido Republicano para colaborar
- Nombra al congresista Peter Orzsak para que controle las cuentas de la Casa Blanca
- Precisa que no quiere "atropellar a la Administración Bush" con su plan de estímulo
El presidente electo, Barack Obama, ha anunciado que su gobierno será "inteligente y eficaz, sin ideología ni partidismo" ya que, a su juicio, los americanos demandan "sentido común" para salir de la crisis financiera.
En su segunda comparecencia en 48 horas, Obama ha hecho un llamamiento a la colaboración con el Partido Republicano para salir de la actual situación económico porquen "la sabiduría no es patrimonio de ningún partido".
Obama ha hecho estas declaraciones tras anunciar el nombramiento de Peter Orszag, actual director del comité de presupuestos del Congreso, como director del presupuesto de la Casa Blanca y de Rob Nabors como su segundo de a bordo.
Controlar cada dólar
"En estos tiempos de desafío, en los que tenemos que hacer frente a un déficit en alza y a una economía en declive, la reforma del presupuesto no es solo una opción, es un imperativo", ha advertido el presidente.
"Hay que impulsar la economía y esto vendrá con inversiones de cara al futuro, que no se desperdician. No queremos continuar con programas ineficaces", ha subrayado tras declarar de forma solemne: "En Washington las cosas no serán como hasta ahora"
Y es que, tanto Orszag como Nabors tendrá como función supervisar el gasto tanto de la Administración como de las agencias gubernamentales dependientes de ella para evaluar en qué partidas se pueden recortar gastos para revertir el déficit público.
"Vamos a examinar nuestro presupuesto federal página por página, línea por línea y hacer los recortes en las partidas que no son necesarias", ha
prometido.
Transición suave
Sobre el anuncio de que su equipo económico trabajará ya para sacar a la economía del "círculo vicioso", ha aclarado que "no pretendemos atropellar a la administración Bush, sino tener planes claros de acción".
"Queremos que todo se haga de forma pausada y suave", ha precisado Obama, que ha asegurado que, con su comparecencia, quería dar a entender que el nuevo presidente "tiene un plan que quiere aplicar rápidamente y con claridad".