Enlaces accesibilidad

Catorce heridos siguen críticos por la explosión de Gavá mientras los Mossos siguen investigando

  • Cinco de los heridos críticos son niños, uno con más del 92% del cuerpo quemado
  • Todos los heridos críticos están ingresados en el Hospital Vall d'Hebrón
  • En este hospital hay otros dos niños con pronóstico grave
  • Otros seis heridos, hasta un total de 22, están en el Hospital de Bellvitge graves
  • Las familias afectadas pueden pedir a partir de este viernes las ayudas económicas
  • La Generalitat confirma que una fuga de agua está en el origen de la explosión

Por
Los afectados de Gavá pueden pedir ya las ayudas

Las familias afectadas por la explosión de Gavá pueden pedir a partir de este viernes las ayudas económicas, mientras 14 de los heridos continúan en estado crítico y la hipótesis de que fue una fuga de agua la que provocó la fisura en la tubería de gas toma fuerza.

Tendrán una ayuda inmediata de 1.000 euros y otros 300 euros mensuales durante los tres primeros meses.

Además, podrán solicitar una de las once viviendas que el gobierno catalán ha ofrecido a las familias del bloque afectado, que se tendrá que ser derribado.

Mientras, siguen ingresados 22 heridos, entre ellos siete menores, en hospitales catalanes por las quemaduras sufridas. En el Hospital Vall d'Hebrón están ingresados 16 personas, 14 en estado crítico. En el Hospital de Bellvitge están los otros seis pacientes graves.

Entre los 14 que están ingresados en estado crítico en el Vall d'Hebrón, donde a primera hora del jueves falleció una mujer de 60 años que tenía quemaduras en más del 85% de su cuerpo, hay trece personas con más de un 80% de su cuerpo abrasado, entre ellos, un menor con el 92% de su cuerpo quemado.

Por encima del 80% la supervivencia sólo llega a la mitad de los casos, según ha explicó el jueves el responsable de la Unidad de Quemados de este centro, Joan Pere Barret.

Hay otros cuatro menores en estado crítico y otros dos en estado grave.

Los otros seis pacientes, todos adultos, están hospitalizados en el Hospital de Bellvitge, todos ellos graves.

Una fuga de agua detrás de la explosión de gas

Una fuga de agua dañó la tubería de gas, que transcurre en paralelo, provocando una fisura por la que salío el gas que, tras acumularse, explotó. El conseller de Interior, Joan Saura, ha confirmado este viernes, en declaraciones a Catalunya Ràdio recogidas por Efe, que ésta es la hipótesis principal con la que trabajan los Mossos d'Esquadra, encargados de la investigación del suceso que ha asolado el barrio de Ca n'Espinós de Gavà.

Saura ha señalado que los técnicos y la policía han detectado "dos agujeros" en las tuberías de agua y gas que corren en paralelo frente al número 1 del camino de ca n'Espinós, donde se produjo la explosión mortal en la madrugada del pasado miércoles día 3.

El gas se filtró hasta el interior del edificio por debajo de la puerta principal y se acumuló hasta causar una primera explosión y un incendio posterior, que los Bomberos de la Generalitat tardaron bastante en apagar debido a la cantidad de gas acumulado, según la primera explicación oficial de los hechos.

A la Generalitat no le constan reclamaciones

Por otra parte, el conseller ha asegurado que a la Generalitat no le consta que exista ninguna reclamación por escapes de agua de los vecinos de Gavà anterior al día del siniestro, dado que tanto el ayuntamiento como las compañías de gas y agua lo niegan.

"No tenemos ningún tipo de reclamación. Las compañías dicen que no y el ayuntamiento, tampoco. Parece que no se ha producido ningún tipo de reclamación anterior al escape de agua y gas", ha dicho.

Saura ha subrayado que el primer aviso sobre un escape de agua lo dieron los vecinos la misma noche del siniestro, lo que motivó el desplazamiento de un coche de la policía local, a cuyos agentes sorprendió la explosión minutos después, cuando se encontraba en el lugar.

No obstante, el alcalde de Gavá, Joaquim Balsera, se comprometió el jueves a verificar todas las llamadas recibidas en el consistorio por parte de los vecinos de la zona de Ca n' Espinós, después que varios de ellos aseguraran que unas horas antes de la explosión habían alertado de un fuerte olor a gas y habían detectado fugas de agua.