Livni dice que los israelíes de origen árabe deberían vivir en el futuro estado palestino
- La ministra israelí cree que la "solución nacional" de los árabes "está en otro lugar"
- El 20% de la población de Israel es de origen árabe
La ministra israelí de Exteriores y jefa del gobernante partido Kadima, Tzipi Livni, ha manifestado que la creación de un estado palestino debería servir como "solución nacional" a los ciudadanos israelíes de origen árabe.
Livni ha explicado, en una visita a un colegio de secundaria de Tel Aviv, que "cuando se cree el estado palestino" podrá dirigirse a los ciudadanos palestinos a los que llaman árabes-israelíes y decirles: "sois residentes con los mismos derechos, pero vuestra solución nacional está en otro lugar".
En las declaraciones recogidas por la emisora del Ejército israelí ha añadido que "el principio" de su camino para un estado democrático "es la creación de dos estados para dos pueblos".
La ministra de Exteriores se ha desempeñado en el último año como jefa del equipo negociador israelí en las conversaciones de paz con la Autoridad Nacional Palestina (ANP), aunque hasta la fecha no se ha prodigado en comentarios acerca de los asuntos bajo discusión.
El 20% de la población es árabe
Sin embargo, no es la primera vez que se refiere en estos términos a la suerte que deberían correr los árabes de ciudadanía israelí y que representan en torno al 20% de la población del país, una vez que se establezca un estado palestino.
El mes pasado Livni recibió numerosas críticas por parte de diputados árabes del Parlamento israelí (Kneset) cuando manifestó que "debe quedarle claro a todo el mundo que el Estado de Israel es el hogar nacional del pueblo judío".
En aquella ocasión, ya adelantó que las demandas nacionales de los árabes-israelíes deberían concluir una vez que el estado palestino se establezca.
Críticas del único ministro árabe
El titular de Cultura, Deporte y Ciencia, Ghaleb Majadele, el único ministro de origen árabe del actual Ejecutivo israelí, condenó las declaraciones de Livni y defendió que "las raíces de los ciudadanos árabes-israelíes de Israel fueron plantadas antes de que el estado fuera creado".
"Son residentes en este país con derechos; su residencia y ciudadanía no están abiertos a negociación. Cualquiera que eleve la idea de transferir población árabe de Israel a los territorios del (futuro) estado palestino es antidemocrático", abundó el ministro.
La jefa de la diplomacia israelí es la segunda candidata en liza favorita de cara a las elecciones generales que se celebran en Israel el próximo 10 de febrero, después del líder del derechista Likud, Benjamín Netanyahu.