Fuertes inundaciones en Mallorca obligan a la activación de la Unidad Militar de Emergencias
- La Unidad Militar de Emergencias se ha activado para intervenir en la isla
- Entre 100 y 120 personas han tenido que ser desalojadas de sus casas
- En una primera intervención la UME ha desplegado 48 militares
- Las lluvias han obligado a cortar hasta 8 carreteras
La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha activado su intervención ante las inundaciones registradas en Mallorca a consecuencia del temporal que desde el lunes azota el archipiélago balear. Entre 100 y 200 personas han tenido que ser desalojadas de sus casas.
Una unidad de intervención ante inundaciones con sede en Bétera (Valencia) se desplazará en las próximas horas a Mallorca, mientras que la UME ha enviado 28 efectivos que viajan en helicóptero desde Madrid.
En total, en una primera intervención, la UME tendrá desplegados en las Islas Baleares un total de 48 militares para sumarse a los efectivos de protección civil que ya operan en la zona. Asimismo la UME tendrá preparados más efectivos si son necesarios.
La intervención es coordinada por el Centro de Operaciones del Cuartel General de la Unidad Militar de Emergencias, ubicado en la base aérea de Torrejón de Ardoz, en Madrid.
Los incidentes se producen después de que tres obreros quedaran sepultados entre los escombros mientras trabajaban en el hotel Son Moll en Cala Ratjada, en el municipio mallorquín de Capdepera.
Desalojo de hasta 120 personas
Entre 100 y 120 personas de la isla han sido desalojadas de una urbanización próxima al Hospital palmesano de Son Lltzer, Son Gallard, por el temporal que azota Mallorca. Una treintena han sido realojadas en el pabellón Germans Escales, aunque la mayoría de ellas lo han hecho en casas de familiares o amigos.
Así lo han indicado fuentes de la Conselleria de Asuntos Sociales, Promoción e Inmigración a Europa Press, quienes remarcaron que el objetivo es reubicar en hoteles a las personas que no cuenten con ningún sitio al que poder acudir.
Actualmente, la consellera del ramo, Fina Santiago, y el regidor de Asuntos Sociales del Ayuntamiento de Palma, Eberhard Grosske, se encuentran visitando el pabellón Germans Escales para conocer de primera mano la situación de esta treintena de personas.
La Conselleria ha manifestado en un comunicado que ha abierto una línea permanente con los municipios para garantizar, así, el alojamiento de las familias que hayan sufrido las consecuencias. Además, ha subrayado que, una vez se normalice la situación, la Conselleria colaborará con los servicios municipales para ayudar a las familias a normalizar su situación lo más pronto posible.
El departamento mantiene desde primera hora un contacto directo con los servicios sociales y los alcaldes de los diferentes municipios para ofrecerles el apoyo del Govern.
Hasta 8 carreteras cortadas
El temporal de lluvia y nieve que azota la isla desde el lunes han afectado a varios puntos de la isla, provocando importantes destrozos debido a la caída de árboles así como al derrumbamiento de paredes.
Las incidencias sobre el tráfico, según la Dirección General de Emergencias, se han concentrado en las salidas y entradas a Palma por la carretera de Manacor, donde ha habido atascos de hasta tres horas, debido al desbordamiento del torrente Gros, que también ha afectado a la carretera vieja de Sineu.
Otros puntos conflictivos para la circulación por las inundaciones registradas han sido el Camí Fondo y la carretera de Llucmajor, a la altura de la depuradora. En total, en toda la isla han estado afectadas por cortes una decena de carreteras.
En los municipios de interior, donde se han registrado menos inundaciones, la fuerza con la que ha caído la lluvia ha causado desprendimientos de tierra en varias carreteras, ha dicho la consellera.
Los equipos de Emergencias del 112, activados desde el lunes, han atendido directamente 500 incidencias de las más de 2.000 que se han producido en la isla en las últimas horas, un centenar de las cuales "han sido realmente importantes", ha asegurado Leciñena.
La mayoría de estas incidencias han sido caídas de muros, árboles derrumbados sobre la vía pública e inundaciones de viviendas, garajes y comercios, cuyos daños aún no han sido evaluados.