Magdalena Álvarez y Alberto Ruiz Gallardón firman el acuerdo que desbloquea la Operación Chamartín
- La construcción comenzará en 2010 y generará unos 240.000 empleos
- El proyecto ampliará la estación de tren, el metro, soterrará la M30, y construirá 16.000 viviendas
La futura "gran ciudad financiera" de Madrid, la "city" que llama el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, comenzará a construirse en 2010, para cuando se prevé el final de la crisis, sobre las instalaciones ferroviarias de Chamartín y aledaños y con una inversión estimada en casi 11.000 millones de euros.
La puesta en marcha de esta operación, que además permitirá ampliar la estación de Chamartín para 22 millones de viajeros, 10 veces más que en la actualidad, y construir 16.000 viviendas, 4.000 de ellas públicas, será posible tras la firma hoy por la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, y el alcalde, de un acuerdo que se ha retrasado más de 15 años.
Un estudio de la Universidad Autónoma de Madrid ha calculado en 240.000 los empleos que generarán la llamada Operación Chamartín o Prolongación de la Castellana, con una media de 20.000 cada año durante las obras, a los que se sumarán los 68.000 empleos que se estima que concentrarán las empresas que se instalen en esta zona.
Y todo ello, sin que las administraciones promotoras de la actuación tengan que aportar un euro, ya que los 4.200 millones que se destinarán a infraestructuras públicas -el resto, 6.753 millones, es la previsión de coste de los edificios, 1.100 de ellos para los de carácter público- saldrán de los beneficios de la operación.
Mientras esos más de 6.700 millones darán forma a una ciudad financiera, con 1,2 millones de metros cuadrados para oficinas, y residencial, con los otros 4.200 millones se ejecutarán por Fomento la remodelación de la estación de Chamartín, el nuevo túnel de conexión para el AVE Atocha-Chamartín y la línea de Cercanías desde la T-4 a Chamartín, que ya ha comenzado a ejecutarse.
El Ayuntamiento construirá el túnel Norte de la M30
A su vez, el Ayuntamiento construirá el túnel del "by-pass" Norte de la M-30, que estaba pendiente hasta que esta operación se desbloqueara, cuyo coste se estima en 1.400 millones de euros, y el conjunto de los promotores llevará a cabo otras 11 actuaciones, entre ellas toda la urbanización, la prolongación de la Castellana en 2,8 kilómetros y de la línea 10 del Metro con cinco nuevas paradas.
Cuando acaben las obras, la estación de Chamartín, terminal de las líneas de AVE del norte peninsular, tendrá 80.000 metros cuadrados más, con 11 vías y seis andenes más, dos vestíbulos, áreas de llegadas y salidas diferenciadas, una nueva conexión con Metro, más espacio para taxis, otras 4.000 plazas de aparcamiento.
Los expropiados reclaman 287 millones
Las 1.100 familias expropiadas por el Estado en las décadas de 1940 y 50 para construir la estación de Chamartín han insistido hoy en su derecho a la reversión de sus terrenos cuando éstos dejen de tener un uso ferroviario, que les reportaría un total de 286 millones de euros.
Esa es la cantidad, "apenas un 1%", que resulta de multiplicar el millón de metros cuadrados expropiados por 286 euros el metro, mucho menos que los 100.000 o 150.000 euros el metro que van a obtener los propietarios que no perdieron sus terrenos, según ha dicho hoy Efe el director del equipo jurídico de la Asociación de Reversionistas de Chamartín, Antonio Luis Vázquez.
Tras la firma del acuerdo entre Fomento y Ayuntamiento para poner en marcha la denominada operación Chamartín, Vázquez ha asegurado que esas familias no van a cejar en el empeño de que se reconozca su "derecho a que reviertan esos terrenos al patrimonio de los expropiados y que se patrimonialice después a cambio de un precio para desarrollar la operacion".
Ha señalado que la asociación considera esta iniciativa "interesante desde el punto de vista del desarrollo urbanístico de Madrid" y está "en disposición de colaborar para que vaya adelante".