Rajoy pide que las cajas sean controladas por el Banco de España y Madrid se niega
- El líder del PP pide que las cajas estén "totalmente alejadas de la política"
- Critica el "espectáculo" dado por la lucha por el poder en estas entidades
- El consejero de presidencia madrileño dice que no puede estar más en desacuerdo
- Blanco exige a Rajoy que pare el enfrentamiento entre Gallardón y Aguirre
El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, ha criticado el "espectáculo" dado en la lucha por el control de Caja Madrid y ha asegurado que las cajas grandes tienen que ser controladas por el Banco de España y "estar totalmente alejadas de la política".
Así, en una entrevista a la Cadena Ser, se ha mostrado a favor de una modificación de la ley de cajas para reducir el papel de los políticos en el gobierno de estas entidades.
La lucha entre la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, por controlar la caja vivió este viernes un tenso capítulo, al lograr el sector liderado por Gallardón el cese del presidente de la comisión de control, partidario de Aguirre y, por tanto, de la aplicación de la nueva ley de cajas al proceso electoral que ahora se abre.
La Comunidad de Madrid ha declarado nulo el cese, al considerar que existe una incompatibilidad del nuevo presidente, Fernando Serrano, para ocupar el cargo.
La Comunidad de Madrid, en desacuerdo
Sin embargo, el consejero de Presidencia, Justicia e Interior de Madrid, Francisco Granados, le ha respondido que "no puede estar más en desacuerdo" con la idea, pues cree que lo "lógico y recomendable" es que lo hagan las Comunidades.
Con esa medida Rajoy considera que se evitarían enfrentamientos internos como el que se está produciendo con el control de Caja Madrid, opinión que no comparte Granados, que es partidario de que la "tutela" de la entidad financiera siga en manos de la Comunidad de Madrid.
Según ha dicho el consejero, "la tutela o el control de Caja Madrid, desde el punto de vista de la solvencia, ya la ejerce Banco de España, como sucede con el resto de las instituciones financieras del país".
Sin embargo, ha precisado que en lo que respecta al funcionamiento y a los órganos de control de Caja Madrid, y de acuerdo con "la configuración actual de las Cajas de Ahorro", le parece "lógico y recomendable" que la 'tutela' la ejerza "la Comunidad autónoma correspondiente".
"No le supongo mayor independencia a un gobernador del Banco de España nombrado por Rodríguez Zapatero sin el consenso del PP, que al consejero de Economía y Hacienda nombrado por Esperanza Aguirre, sino mas bien todo lo contrario", ha añadido Granados para ahondar en su desacuerdo con la propuesta de Rajoy.
Blanco critica a Rajoy
Mientras tanto, el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, ha exigido al líder del PP, Mariano Rajoy, que ejerza su autoridad y ponga fin al debate interno creado en Caja Madrid por la "ambición" de Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz-Gallardón, lo que ha atribuido al intento de control político de esta entidad.
El dirigente socialista ha dicho en un acto público del PSOE de Sevilla que el PP se ha convertido en un "barco a la deriva", una situación de la que puso como ejemplo el "enfrentamiento" entre la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón.
"Es tiempo de liderazgo, de propuestas y respuestas políticas, y es necesaria la determinación para generar confianza en nuestro país y en nuestro sistema financiero y sus entidades", ha explicado Blanco, quien a continuación ha reclamado a Rajoy que ponga fin al debate creado por el "control político" de Caja Madrid.
En su opinión, este enfrentamiento, que ha atribuido a la "ambición" de ambos dirigentes del PP de Madrid, está haciendo un "flaco favor" a una entidad ahorradora tan importante y está generando "más desconfianza".
"No es consentible que Caja Madrid esté inmersa en un debate por la ambición política de Aguirre y Gallardón para controlarla", ha recalcado el vicesecretario general del PSOE.
Además, según Blanco, en esta disputa "ni Gallardón es el bueno ni Aguirre la mala, los dos son iguales y persiguen el control político de la caja y eso es sencillamente intolerable".