Concentrados en un hotel secreto sin poder hablar con los medios antes de preguntar a Zapatero
- Rodríguez Zapatero asistirá a su segunda edición de 'Tengo una pregunta' el lunes 26
- Los ciudadanos elegidos para preguntar al presidente llegarán un día antes a Madrid
- Se hospedarán todos juntos en un hotel del que desconocen el nombre
- Firman un contrato de confidencialidad para no hablar con medios antes del programa
- No tienen que pagar ningún gasto, pero no reciben ni dinero ni regalos por participar
- Rodríguez Zapatero asistirá a su segunda edición de 'Tengo una pregunta' el lunes 26
Concentrados como los deportistas antes de un partido importante. Los ciudadanos elegidos para preguntar al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el próximo 26 de enero en 'Tengo una pregunta para usted' llegarán a Madrid un día antes de que se emita el programa.
Lo que se ve en televisión es sólo el final de un trabajo de horas para que todo salga perfecto. De horas de nervios y de memorizar la pregunta, muchas veces escrita, para que el miedo al directo no juegue malas pasadas.
Una vez que TNS Demoscopia elige a los ciudadanos que representan a la sociedad española, se va contactando con ellos para organizar el plan de viaje. Esta vez están apostando por el tren por "miedo a los temporales y a los retrasos" y cancelaciones de los vuelos, según explica la directora de proyectos Eva Aranda.
Un día antes del programa, a las 19 horas, se les concentra en un hotel de Madrid del que no se les dice el nombre. A los que son de la capital española se les recoge en taxi y se les lleva, también sin que sepan nada.
No se dice nada a nadie. Se intenta evitar que acudan medios de comunicación para entrevistar a los elegidos o que alguien intente influir en sus preguntas.
Ya en el hotel se les hace una ficha con su foto y se les asigna un número para las dos jornadas de trabajo.
Contrato de confidencialidad
Pero la discrección va mucho más allá. Los participantes se comprometen a no decir a nadie que van a participar en 'Tengo una pregunta para usted'. Hasta después de la emisión tampoco pueden hablar con ningún medio de comunicación.
Eva Aranda recuerda que en una ocasión un hombre de los seleccionados "comenzó a conceder entrevistas explicando qué iba a preguntar, se le dio de baja y no pudo participar".
Primero se comprometen verbalmente en la llamada telefónica, que queda grabada, y luego, firman el contrato de confidencialidad ya en el hotel.
"Pueden hacer la pregunta que quieran"
Los participantes "llegan nerviosos, con dudas sobre qué se ponen, si tienen que maquillarse o no". Por eso, el día previo se les explica todo en una cena. Luego a la mañana siguiente "se hace una sesión de trabajo en el hotel colocados exactamente como lo harán en plató".
En ese momento es cuando se les pregunta "sobre que tema quieren hablar, sólo el tema, no queremos saber la pregunta concreta, pueden hacer la que quieran", aclara Eva Aranda. El objetivo es sólo ordenar las cuestiones por temas similares a la hora de la emisión.
Luego comen sobre las 13.30 horas y se les da un descanso antes de trasladarse en autobús a los estudios de TVE. Sobre las cinco y media, seis de la tarde, se ensaya cómo deben entrar al plató y cómo deben utilizar el micrófono. "Algunos te preguntan si pueden escribir la cuestión y la repasan varias veces".
Después hacen tiempo en una carpa preparada al efecto junto al plató hasta que vuelven a entrar para la conexión con el Telediario.
El resto ya lo han visto los espectadores en las siete ediciones anteriores del programa 'Tengo una pregunta para usted'. Los ciudadanos van preguntando al invitado sobre lo que quieran según les va dando paso Lorenzo Milá. Es el momento de las anécdotas como la del café de Zapatero de la primera edición o el sueldo de Rajoy de la segunda.
Después hay un coctel, ya fuera de cámara, donde los ciudadanos pueden charlar con el invitado.
No reciben ningún regalo ni dinero
¿Y se cobra algo por pasar dos días en Madrid? "No, no se les da ningún regalo, ni dinero, sólo se les paga los gastos del viaje", nada más.
La directora de proyectos de TNS Demoscopia cuenta que para muchos el regalo es "la satisfacción de acudir al programa". Muchos viven experiencias como montar en avión o alojarse en un hotel, por primera vez, como una mujer que fue selecionada en una de las ocasiones y que nunca había dormido fuera de casa.