El Gobierno centrará en la prevención la Estrategia Nacional sobre Drogas

• El Consejo de Ministros aprueba los ejes de la lucha contra la drogodependencia hasta 2016
• Entre los objetivos, promover la implicación social y retrasar el inicio del consumo
• Las detenciones por narcotráfico aumentaron un 8% en los nueve primeros meses de 2008
• En ese período, los decomisos de estupefacientes crecieron un 18%

"La clave es la prevención", ha destacado la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, al presentar la Estrategia Nacional sobre Drogas, aprobada este viernes por el Consejo de Ministros y que recoge las líneas de actuación contra la drogodependencia para los próximos ocho años.

La Estrategia, que se desarrollará mediante dos planes de acción cuatrienales (2009-2012 y 2013-2016), tiene unos objetivos "tan sencillos como vitales", ha señalado De la Vega, que pasan por "reducir la oferta y la demanda, aumentar la información sobre los efectos de las drogas, mejorar la formación de los trabajadores y reforzar la cooperación internacional".

En cualquier caso, la vicepresidenta ha insistido en que se centrará en la prevención, por lo que el Gobierno seguirá desarrollando campañas de concienciación sobre los riesgos de este consumo y programas de asistencia a los drogodependientes.

Así, se buscará promover la implicación social, retrasar la edad de inicio del consumo, acabar con la creencia de que el consumo de drogas es normal, garantizar una asistencia de calidad, limitar los daños sobre la salud, y facilitar la incorporación social de los drogodependientes.

Descenso del consumo

De la Vega ha destacado que, desde 2004, "este problema de salud pública viene rompiendo su tendencia al alza", y que desde ese año el consumo ha descendido "apreciablemente".

Según el informe de evaluación presentado en el Consejo por el ministro de Sanidad, el consumo de cannabis en los jóvenes de 14 a 18 años se ha reducido en más de seis puntos en el último año y en más de tres el de cocaína.

En el resto de la población, la prevalencia de consumo diario de alcohol ha bajado más de cuatro puntos y la de tabaco más de tres, mientras que el consumo de cocaína se ha estabilizado por primera vez desde 2005.

También está estabilizado el consumo de éxtasis, anfetaminas y alucinógenos, se mantiene en niveles bajos el consumo de heroína e inhalables volátiles, y ha aumentado la percepción del riesgo para todas las conductas de consumo.

Más detenciones y decomisos

Desde el punto de vista de la persecución del narcotráfico, el titular de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba , ha presentado el Informe sobre la situación de la lucha contra el tráfico de drogas en España, que revela un aumento de las detenciones de traficantes, los decomisos de estupefacientes y las denuncias por consumo en lugares públicos. "Cada vez es más difícil conseguir drogas" en España, ha asegurado De la Vega.

Así, las detenciones por delitos de tráfico de drogas ascendieron a 15.396 durante los nueve primeros meses del pasado año, un 8,04% por ciento más que las 14.250 registradas en el mismo período de 2007.

También creció el número de denuncias por consumo de drogas en lugares públicos, en total 217.414 entre enero y septiembre de 2008, lo que supone un aumento del 19,7% respecto al mismo período del año anterior, en el que se efectuaron 181.529 denuncias.

Suben el hachís y la heroína

El número de decomisos aumentó un 18,81% en el mismo período, pasando de 202.451 entre enero y septiembre de 2007 hasta 240.539 el año pasado.  

Las incautaciones de cocaína permanecen estables, los de hachís se incrementan en un 31,92%, la heroína y el éxtasis aumentan muy considerablemente (un 165,26% y un 75,70% respectivamente), mientras que el LSD y el speed disminuyen un 14,83% y un 43,23% respectivamente

En cuanto a las grandes operaciones -aquellas en las que las cantidades de drogas incautadas sobrepasan los cinco kilos en cocaína, 100 kilos en hachís, un kilo en heroína, 1.000 unidades de MDMA (éxtasis) o un kilo de speed-, se desarrollaron 939 frente a las 900 de 2007. Además, se desactivaron doce laboratorios, de ellos ocho de cocaína, dos de hachís y otros dos de heroína.