La ministra de Fomento achaca al cambio de rumbo de la tormenta el colapso de Madrid por la nieve
- Magdalena Álvarez comparece en el Congreso para explicar lo ocurrido el 9 de enero
- Defiende que los protocolos en la Comunidad de Madrid se activaron a tiempo
- Barajas se cerró por "la intensidad de la nevada y la disminución de la visibilidad"
La ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, defiende la actuación del Gobierno el pasado 9 de enero, cuando un temporal de nieve colapsó Madrid y obligó a cerrar el aeropuerto de Barajas, porque si hizo todo lo que se pudo.
No obstante, ha pedido "dispulpas a todos los ciudadanos que se vieron afectados, especialmente" a los habitantes de Madrid y ha anunciado que desde su departamento se llevarán a cabo los cambios oportunos para evitar que esta situación se vuelva a repetir.
Álvarez ha asegurado que los protocolos se activaron a tiempo y que fue el cambio de rumbo de la tormenta y la intensidad del tráfico en la hora punta de un viernes lo que provocó el colapso de la red de carreteras, según informa RNE. Lo ha explicado en el Congreso, donde comparece a petición propia.
Ha recordado a este respecto que la nevada se produjo en hora punta de la mañana y en viernes, el día con mayor volumen de tráfico de entrada y salida en Madrid, con 1,7 millones de desplazamientos.
Asimismo, defendió que las carreteras del Estado tuvieron un mejor comportamiento que aquellas que dependen de la Comunidad de Madrid y del ayuntamiento de la capital que transmitieron a las primeras los problemas de circulación.
Cierre "mínimo e imprescindible"
Sobre el cierre de Barajas, la titular de Fomento ha explicado que en el aeropuerto había preparadas cinco quitanieves, pero que hubo que suspender el tráfico "pese a que desde el mismo inicio de la nevada se estuvo trabajando de forma ininterrumpida". El cierre, de 3 horas y 20 minutos fue "mínimo e imprescindible", ha destacado.
Magdalena Álvarez ha afirmado que "fue inevitable" cerrar Barajas pese a que "se pusieron en marcha todos los medios disponibles" para no tener que hacerlo cuando se conocieron las previsiones meteorológicas.
En una comparecencia en la Comisión de Fomento del Congreso, Álvarez ha defendido que "la intensidad de la nevada, con un espesor de 30 centímetros en algunos puntos, y la baja visibilidad disminuyeron la seguridad, lo que hizo que la torre de control interrumpiera las operaciones".
Anima a reclamar ante las aerolíneas
Por otra parte, la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, ha animado a los pasajeros a exigir a las compañías aéreas que cumplan con sus obligaciones y ha dicho que en el Ministerio sólo se han recibido "sorprendentemente 190 reclamaciones por pasajeros afectados en operaciones de Iberia hasta el día 25 de enero".
Se ha referido en concreto a la situación de la compañía Iberia, sobre la que ha dicho que existía un conflicto interno con los pilotos y ha señalado que ya el 16 de diciembre de 2008 AENA inició de oficio actuaciones para requerir información a la compañía sobre las cancelaciones y retrasos en la compañía.