El Senado enmienda la cláusula proteccionista para evitar una guerra comercial
- El Senado garantiza que se cumplirán los tratados internacionales
- La cláusula Buy American amenazaba con desatar una guerra comercial
- Obama calficó la clásula de proteccionista
- La UE iba a denunciarla ante la OMC
El Senado de EE.UU ha desactivado por abrumadora mayoría la polémica cláusula "Buy American" que amenazaba con desatar una guerra comercial. La cláusula del plan de estímulo económico de Obama se ha endurecido aparentemente en la cámara alta, ya que excluye no sólo el hierro y acero extranjeros de los proyectos financiados por el plan, sino también los productos manufacturados.
Pero la enmienda aprobada introduce un matiz esencial: garantiza que se cumplirán los acuerdos comerciales con Canadá y la Unión Europea. La medida "Buy American", compre americano, se aplicará "de manera consistente con las obligaciones suscritas por Estados Unidos en los tratados internacionales".
Sin embargo, el Senado ha rechazado otra enmienda más clara propuesta por John McCain, el rival republicano de Obama en las pasadas elecciones presidenciales. McCain abogaba por eliminar directamente la polémica cláusula del texto para evitar que otros países respondieran con medidas similares.
Se espera que el Senado vote esta misma semana los casi 900.000 millones de dólares para reactivar la economía. En todo caso, habrá que ver si la Cámara de Representantes da el visto bueno a la cláusula suavizada cuando vuelva de la cámara alta.
Proteccionismo estilo Gran Depresión
El propio presidente Obama calificó la cláusula original de proteccionista y señaló que enviaba un pésimo mensaje a los socios comerciales de Estados Unidos. "Tenemos que asegurarnos que ninguna de las medidas que tomemos provoque una guerra comercial" dijo en una entrevista el martes en la cadena ABC.
Y el mensaje que habían recibido los socios canadienses y europeos era claro. Sus embajadores en Washington habían advertido que si la cláusula proteccionista salía adelante desataría antes o después represalias. Un portavoz de la Comisión Europea señaló que llevarían el caso a la Organización Mundial de Comercio.
Los precedentes históricos dejan claros los efectos de las medidas proteccionistas. La ley Smoot-Hawley de 1930 restringió la importación de unos 20.000 productos extranjeros, desde la ropa francesa a la mantequilla argentina. El objetivo era salvar los empleos americanos, pero lo que hizo fue desatar una oleada de represalias que acabó con el comercio mundial y profundizó la Gran Depresión.
Ahora, el comercio mundial está paralizado según las previsiones del Fondo Monetario Internacional y lo último que necesita son medidas proteccionistas. De hecho, en la cumbre del G-20, celebrada el 15 de noviembre en Washington, los países asistentes se comprometieron a evitar medidas proteccionistas. Al menos durante doce meses.