Sarkozy enfurece a Brown por considerar un "error" su plan de bajada del IVA
- El presidente francés declaró por televisión que no había funcionado
- El Elíseo le ha comunicado a Downing Street que no critica su política económica
- "Eso está bien", ha contestado irónicamente la oficina del 'premier' británico
La principal medida del gobierno de Gordon Brown para salir de la crisis económica, la bajada del IVA un 2,5% es un "error" que "absolutamente no ha funcionado", según el presidente francés, Nicolás Sarkozy, abriendo un incidente diplomático entre ambos países en pleno debate interno en Reino Unido sobre la operatividad de estas medidas económicas.
"El Elíseo ha estado en contacto con nosotros esta mañana para asegurarnos que estas declaraciones no significaban una crítica a la política económica de Reino Unido... lo que está bien", ha respondido un portavoz de Downing Street, dejando poco lugar a dudas de la irritación que han provocado las palabras de Sarkozy en Brown.
En este sentido, el portavoz ha recordado el contexto en que se han producido estas palabras, "un debate doméstico en televisión sobre el camino que tieen por delante la economía francesa y las propuestas francesas para un estímulo económico".
Las palabras de Sarkozy
En realidad, las palabras de Sarkozy no pudieron ser más claras: "Reino Unido está bajando impuestos y eso no les traerá nada. El consumo continúa descendiendo en Reino Unido", comentó en la entrevista televisada de 90 minutos de la noche del jueves, en la que defendió el gasto público de infraestructuras para favorecer la demanda frente a la medida impulsada por Brown.
Downing Street contrapone a esta visión un estudo reciente del Instituto de Estudios Fiscales británicos que descibre como un "estímulo razonablemente efectivo" el recorte de la medida, que habría evitado que las ventas caigan y que aumenten las compras más de lo previsto.
"Lo cierto sobre el IVA y que ya lo hemos dicho es que el recorte durará un año, por lo que es muy pronto para ver qué efecto ha tenido", ha recalcado el portavoz.
Sin embargo, las críticas de Sarkozy no son las primeras que se han escuchado en Europa contra la medida de Brown, ya que el ministro holandés de finanzas, "no era una medida muy sabia", mientras su homólogo alemán la calificó de "estúpido keynesianismo".
Estas declaraciones 'calientan' el ambiente de cara a la cumbre del G-20, que se celebrará el próximo dos de abril en Londres y que dificultará el papel de Brown para lograr una cooperación internacional contra la crisis.