Bermejo deja la puerta abierta al "diálogo y el acuerdo" con los jueces

• El ministro de Justicia critica la huelga "cuando se han creado más plazas de jueces y fiscales"
• Para él, el origen de la huelga está en el "temor" de muchos jueces a ser controlados
• Además, la sanción al juez Rafael Tirado y las reivindicaciones económicas, también son causa

El ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, ha asegurado este miércoles que el Gobierno mantiene abierta la puerta del "diálogo, el acuerdo y el compromiso" con quienes mantienen la huelga judicial.

En su comparecencia ante la Comisión de Justicia del Congreso de los Diputados, celebrada esta tarde, Fernández Bermejo ha manifestado que "la inmensa mayoría de la carrera judicial" permanece "muy lejos del ruido" que algunos, "una minoría", mantiene de cara a la huelga.

A su juicio, "no deja de ser sorprendente que se produzca una huelga, no una amenaza de cese cualquiera, en el momento en el que se han creado más plazas de jueces y fiscales".

Para el ministro, el origen de la huelga radica, entre otras cosas, en el "temor" de muchos jueces a ser sometidos al control de la actuación jurisdiccional, así como en la sanción al juez Rafael Tirado, por el 'caso Mariluz' y las reivindicaciones económicas.

Bermejo ha hecho hincapié en la comprensión y la colaboración que ha encontrado en la Asociación Profesional de la Magistratura y Jueces para la Democracia y señaló que la huelga ha sido instigada por una "plataforma sin ninguna legitimidad".

Hay mejoras en los juzgados, pero "lucen poco"

El ministro ha insistido en las iniciativas emprendidas por el Gobierno para la modernización de la Justicia. "Se hacen cosas, se han hecho muchas cosas en estos años de democracia, pero yo diría que lucen poco", ha dicho, como sistemas informáticos o la unificación de las normas de los registros.

Bermejo ha indicado que de nada sirve poner nuevos instrumentos si quienes han de utilizarlos "se olvidan" de introducir los datos pertinentes.

En cuanto a las reivindicaciones retributivas que algunos aún mantienen, ha señalado el ministro que "no está el horno para bollos" cuando la situación economómica del país "es la que es".